Aprueban creación de Liga Internacional de Bofetadas, ¿el deporte que definirá nuestra era?
Sociedad
Por: Pedro Luizao - 10/27/2022
Por: Pedro Luizao - 10/27/2022
Como si no abundaran las formas de entretenimiento soez –o quizá porque abundan y la gente es cada vez más propensa a ellas– una reciente votación en la comisión atlética de Nevada autorizó la creación de una nueva liga deportiva: la Power Slap League (o Liga de la Bofetada de Poder), la cual tendrá un organismo rector y un carácter de deporte oficial, al menos en el estado de Nevada.
Este de deporte de gran linaje inició en Rusia en 2016 y tuvo un rápido crecimiento en países del este de Europa. En 2019 se llevó a cabo un "campeonato mundial" en Kasnoyarsk. La competencia consiste simplemente en que una persona le propina una bofetada a otra a mano limpia, mientras la otra espera en agonía. Y así sucesivamente, hasta que alguno queda noqueado o se rinde. A diferencia del boxeo, aquí no hay defensa. Un periodista definió este deporte como: "aquello que se le ocurriría a un adolescente de 13 años que quisiera inventar un deporte". Pero eso implica una visión de los niños de 13 años como particularmente inclinados a cosas estúpidas y violentas (quizá como resultado de entretenimiento similar a este). Wikipedia hace un buen resumen de lo que acontece:
El deporte no cuenta con la categoría de peso, por lo cual muchas veces las competencias no son justas, ya que la confrontación se realiza entre oponentes de diferente contextura física y capacidad. Después de recibir bofetada los participantes cierran los ojos, se tambalean, sangran por la nariz, pierden algunos dientes y hasta pueden llegar a sufrir daño neuronal. Pero al final, casi siempre chocan sus manos y posan juntos como buenos amigos.
Las autoridades de la UFC (Ultimate Fighting Championship, la empresa global de artes marciales mixtas), que están involucradas en este deporte, dijeron que antes de aprobarlo se consultó a especialistas médicos y se incluyeron las recomendaciones necesarias para establecer ciertos niveles mínimos de seguridad. Pero esta es una justificación un poco dudosa, pues la esencia misma de este deporte es recibir fuertes golpes en la cabeza sin protección, algo que cualquiera sabe que es peligroso. Hace unos meses, un competidor polaco murió luego de haber entrado en coma después de uno de estos enfrentamientos.
La popularidad de los videos de estas competencias, que han llegado a contar con celebridades como Arnold Schwarzenegger como comentarista, parecer estar fincada en el morbo ya no sólo de la violencia, sino de la estupidez. Personas que no tienen nada mejor a qué dedicarse que propinar bofetadas o soportarlas al tiempo que un astuto comentarista en el mismo escenario hace mofa de lo que sucede.
La popularidad puede explicarse sólo a través de la ascendencia de las redes sociales y los desafíos virales, que se han vuelto todavía más populares en la pandemia. La Power Slap League marca el triunfo de la mentalidad TikTok, heredera de la cultura de MTV (y programas como Jackass) de hacer lo que sea para producir unos segundos de entretenimiento, no importa cómo. El entretenimiento sin ningún valor como soporte, sólo puro, crudo (y en este caso, rudo) entretenimiento.
