El COVID-19 es un virus nuevo, lo que significa que nadie tiene inmunidad. La desventaja de esta cepa es que se transmite demasiado rápido, a diferencia de un virus común de gripa (ya que una gran cantidad de personas son inmunes a muchas de las cepas, el índice de contagio es muchísimo menor).
Respecto al coronavirus COVID-19, hasta el martes 07 de abril de 2020 se tenían registrados en el mundo:
- 1 381 014 infectados confirmados
- 76 507 decesos
- 292 467 recuperados
Todo esto con datos recopilados por el Center for System Science and Engineering (CSSE) de la Universidad John Hopkins (Baltimore, EEUU).
Lo más importante en este momento es frenar la velocidad de la transmisión de este virus, para que de esta manera evitemos el colapso de los sistemas de salud.
¿Cómo frenar la transmisión? La principal herramienta es la distancia social.
El distanciamiento social es una de las medidas tomadas para detener o frenar la propagación de una enfermedad contagiosa. A nivel individual, se refiere a mantener una distancia suficiente entre una y otra persona, con el objetivo de reducir el riesgo de entrar en contacto con las gotas de saliva que se producen cuando una persona infectada tose o estornuda. A nivel colectivo, las medidas de distanciamiento social incluyen la limitación o cancelación de grandes reuniones de gente, como eventos artísticos de todo tipo, límite en el uso del transporte público, evitar estar en centros comerciales y suspender las clases o eventos deportivos.
En esta gráfica de los Centers for Disease Control and Prevention podemos observar en color rojo el número de casos en el tiempo si no adoptamos medidas lo antes posible. El color azul representa el número de casos si tomamos las medidas necesarias.
La línea punteada representa la capacidad que tiene el sistema sanitario, un límite que es muy importante no rebasar. Como ya dijimos, es muy importante hacer todo lo posible por que hospitales y centros de salud no rebasen su capacidad.
Para darnos una mejor idea: no es lo mismo tener cien casos en un solo día, que diez casos distribuidos en diez días.
Wuhan nos enseñó que la letalidad de este virus se dispara cuando colapsa el sistema de salud. Y aunque todavía hay muchísimas cosas del COVID-19 que no conocemos, sí sabemos cómo enfrentar una epidemia.
Agradecemos a Alberto Sicilia, doctor en Física Teórica, por difundir información de manera clara y sencilla. Si quieres saber más, este es el hilo de Twitter que publicó hace unos días.
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