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El exquisito erotismo que sobrevivió a la represión franquista

Arte

Por: Jimena O. - 05/19/2017

Lo que sobrevivió al franquismo se esconde en archivos, librerías provincianas, tiendas de antigüedades y librerías de segunda mano

Desde la adopción de la religión católica como premisa de vida, la sexualidad se ha enfrentado a numerosas represiones a lo largo y ancho del mundo. De alguna manera ejerció una influencia significativa en la mayor parte de las vivencias sexuales –desde las costumbres, tendencias y mitos– que continúan practicándose en la actualidad, como sentir vergüenza con la concupiscencia: hay que vivirlo casi en lo oscurito, porque uno no puede decir que se masturba.

La sexualidad, principalmente el erotismo, ha sobrevivido al interior de nuestra carne pese a las prohibiciones, amenazas, mentiras y terrores que rondan en torno a ella. Un ejemplo de su resiliencia es, en palabras de Maite Zubiaurre, profesora de UCLA, el “periodo riquísimo en cultura erótica [que sobrevivió] enterrado bajo el régimen fascista de Franco”.

Durante muchas décadas, la literatura y la filosofía de España se enfocaron sombríamente en la caída “del glorioso imperialismo español después de perder sus colonias en 1898”; sin embargo, durante esa época, existieron “brillantes innovaciones sociales y culturales, particularmente relacionadas al sexo y a Eros”. Desgraciadamente, dichas innovaciones se vieron fuertemente censuradas durante la dictadura de Franco, por lo que “los materiales no sólo fueron censurados, sino prohibidos en librerías y archivos, o destruidos –no sólo por las autoridades sino por los mismos propietarios… quienes temían a la cárcel”.

Ahora lo que sobrevivió al franquismo se esconde en archivos, librerías provincianas, tiendas de antigüedades y librerías de segunda mano. Desde revistas eróticas, fotografías, ilustraciones, postales, cortos y novelas, hasta textos de nudismo y sexología; y cada uno de ellos:

no es solamente rico y multidisciplinario, sino refrescantemente desinhibidor en sus representaciones visuales y textuales, la mayoría de las veces abiertamente anticlerical, y extremadamente bien escrito en todas las formas del amor ‘no reproductivo’, desde prácticas de autosatisfacción hasta infinitas formas de amor homosexual.

En su libro Culturas de la España erótica, 1898-1939, Zubiaurre “ofrece una ventana a la época de la burguesía moderna y las ansiedades que acompañaron al cambio”. Conoce a continuación algunas de las imágenes de esta sexualidad resiliente que, sin importar su prohibición y represión, se posicionó como una necesidad más latente para la humanidad: