Solsticio de verano, 21 de junio de 2021: el día más luminoso del año
Salud
Por: Luis Alberto Hara - 06/20/2021
Por: Luis Alberto Hara - 06/20/2021
Este 20 de junio a las 22:32 (hora del centro) ocurrirá el solsticio de verano en el hemisferio norte y el solsticio de invierno en el sur. Esta es una de las grandes fechas en el calendario astronómico y un momento igualmente esencial en los calendarios religiosos de muchas culturas.
El solsticio recibe este nombre porque el sol aparentemente se queda quieto un instante. Solsticio significa literalmente "sol quieto". Cuando el sol encuentra cerca del equinoccio, en primavera o en otoño, su movimiento aparenta ser más rápido, mientras que en invierno y verano casi no se mueve.
Para los habitantes del norte el solsticio marca el día más largo y luminoso del año y el inicio del verano y para los del sur, el día más oscuro y el inicio oficial del invierno. Los cambios estacionales son resultado de que la Tierra gira alrededor del sol en cierto ángulo, lo cual determina la cantidad de luz solar que recibe.
Tradicionalmente, el solsticio de verano era una celebración ligada a los ciclos de la agricultura. Puesto que una parte importante de la religión está ligada a la arqueología y a la astronomía, los solsticios y los equinoccios han sido vinculados a fiestas religiosas en las que se celebran los nacimientos de dioses y santos o, en Roma, a las fiestas estatales de las saturnalias en el solsticio de invierno.
Siendo el sol el símbolo de la energía creativa, el solsticio era también una fiesta de la fertilidad en la que tradicionalmente se rendía culto a divinidades ligadas a la luz y al poder. En la tradición cristiana, esta fecha se confunde e interpenetra con la Fiesta de San Juan. Entre las religiones "paganas" europeas y sus versiones new age se celebra el llamado Midsummer. Algo de esto puede verse en las celebraciones masivas del solsticio que se llevan a cabo en Stonehenge, el sitio megalítico construido con referencias al curso solar.
La celebración del solsticio suele ser un buen pretexto para recordar los ciclos naturales y la conexión de la vida en la Tierra con el cosmos. En algunas culturas, como en la china, siguiendo la medicina tradicional, se modifican conductas (como los hábitos de sueño) y regímenes alimenticios en relación a la estación en la que se esté.
En muchas de estas antiguas tradiciones, la salud es definida como un equilibrio con la naturaleza y sus procesos estacionales. La salud es un ritmo y una relación armónica con el cosmos.
En líneas generales, los solsticios y los equinoccios son los grandes pivotes del año, a través de los cuales podemos recibir recordatorios de que no todos los tiempos son iguales. Hay tiempos para sembrar, tiempos para cosechar, tiempos para tomar provisiones, tiempos para resguardarse y esperar, etc. Al vivir en ciudades, lejos del contacto con la naturaleza y sus ritmos, estas verdades a veces nos pasan desapercibidas.