5 preciosos lugares en México para recibir la energía de la primavera
Buena Vida
Por: Jimena O. - 02/26/2020
Por: Jimena O. - 02/26/2020
Los equinoccios ocurren dos veces al año, en marzo y en septiembre. En este momento el eje de la Tierra es perpendicular a los rayos del sol, lo cual provoca que el día y la noche tengan la misma duración mientras transcurre ese fenómeno. De hecho, "equinoccio" proviene de la palabra en latín aequinoctium, compuesta a su vez de aequus, ‘igual’ y nox, noctis, ‘noche’.
En marzo, en el hemisferio norte ocurre el equinoccio de primavera. La fecha en la que sucede este fenómeno cambia cada año, ya que el periodo orbital de la Tierra no es exacto, es decir, no tarda 365 días exactos en dar una vuelta completa alrededor del sol, sino que dicho movimiento de traslación dura 365.2425 días. Este pequeño desfase se ajusta cada 4 años con los años bisiestos y, quitando un bisiesto, cada 400 años. Esa es la razón por la cual el equinoccio puede ocurrir un día entre el 19 y 21 de marzo.
A partir del equinoccio la duración del día se alarga aproximadamente 3 minutos cada día hasta finales de junio, cuando tiene lugar el solsticio (de verano en el hemisferio norte, de invierno en el hemisferio sur).
Es una creencia popular que durante el equinoccio de primavera corre una energía particular que tiene la cualidad de "recargarnos", lo cual es sin duda herencia de las cosmovisiones que nos precedieron, pues prácticamente todas las culturas de la antigüedad celebraron de algún modo este día. En el caso de México, en épocas recientes se ha vuelto una costumbre visitar ciertos sitios arqueológicos de México (especialmente Teotihuacán y Chichén Itzá), vestirse de blanco, alzar las manos y de esta manera recibir la energía del sol, pues se cree que las culturas prehispánicas hacían este mismo ritual.
Cabe aclarar, sin embargo, que varios arqueólogos han desmentido que nuestros antepasados hayan levantado las manos al sol durante el equinoccio de primavera. En todo caso, la civilización maya mexica tenía un amplísimo conocimiento astronómico, por lo que este tipo de eventos marcaron para ellos el inicio de los ciclos de la agricultura, muy relacionados también con la fertilidad.
Sea como fuere, ya sea que quieras "recargar tu energía" o que aproveches esos días para escaparte de tu rutina diaria, a continuación te compartimos algunos de los mejores lugares para recibir la primavera.
Ubicado en el corazón de la Sierra Madre Oriental, este pueblo es el ideal para visitar durante el equinoccio. El jardín central está lleno de flores. Además, Xicotepec es uno de los productores de café más importantes de Puebla, por lo que puedes beber delicioso café a todas horas. Como dato especial cabe mencionar que cada año en estas fechas se celebra ahí la Feria de la Primavera.
Imagen: Yo amo Xicotepec (Facebook)
La palabra Dzibilchaltún está formada por cuatro vocablos mayas: Dzib, "escritura"; il, locativo; chal, "plano"; y tun, piedra, todo lo cual puede traducirse como "lugar donde hay escritura en las piedras planas". Los arquitectos mayas planearon este sitio de manera que durante el equinoccio de primavera y los solsticios de verano e invierno, el sol atravesara la entrada principal del templo. Dzibilchaltún se encuentra a media hora al norte de Mérida.
En este pueblo fronterizo, la primavera se recibe con una danza tradicional a la Madre Tierra. Esta ceremonia no es un espectáculo, sino un ritual espiritual llevado a cabo por los pueblos indígenas del norte de México. También puedes visitar diferentes cervecerías y fábricas de cerveza, pues la región es la principal productora en México de cerveza artesanal. Además, no olvides que en este Pueblo Mágico se inicia la Ruta del Vino y del Queso.
Este sitio arqueológico es perfecto si quieres presenciar el conocimiento astronómico de la cultura maya. La principal actividad de este asentamiento fue la agricultura, por lo que las construcciones están orientadas en calendarios astronómicos que organizaban las actividades alrededor de la agricultura. Está a 1 hora en coche de la ciudad de Campeche.
Fue una de las ciudades más importantes de Mesoamérica y fue la capital de la cultura zapoteca. Entre las sugerencias más destacas te recomendamos el Monumento de los Danzantes, una de las construcciones más importantes de este sitio. Los visitantes acuden a él para recargarse de la energía del sol. Monte Albán se encuentra aproximadamente a 40 minutos de la ciudad de Oaxaca.
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