Es posible que estemos viviendo en la era del yo, como creía el documentalista Adam Curtis y, así, en la búsqueda del beneficio personal cada vez existen más personas enamoradas de su propia imagen y alienadas del mundo.
Según el doctor Joseph Burgo, autor del libro The Narcisist You Know, no por ser muy activos en las redes sociales o tomarnos una selfie somos narcisistas consumados; sin embargo, sí se ha detectado un incremento en esta condición.
Burgo considera, quizás un tanto obviamente, que la característica fundamental de un narcisista es no tener interés por los demás o simplemente no ser capaz de sentir por ellos. Algo así como una falta de empatía arropada en la propia glorificación, en el ensimismamiento solipsista. Peligrosamente, aquí hay una tenue línea que separa al narcisista del psicópata.
Otras características son sentirse infravalorado, pensar que los demás no son tan inteligentes como tú y sentir una justificación para agredir a las demás personas.
Burgo cree que actualmente 5% de la población demuestra lo que llama "narcisismo extremo": personas que, por ejemplo, te cuentan sobre su vida durante 1 hora sin nunca preguntarte por la tuya.
El problema que enfrentan estas personas es que "estar interesados en la vida de los demás es la base de las relaciones humanas", dice Burgo.