10 personajes históricos que afirmaron poseer poderes mágicos
Por: Juan Pablo Carrillo Hernández - 09/22/2015
Por: Juan Pablo Carrillo Hernández - 09/22/2015
En la historia del mundo la magia ha tenido diferentes formas y funciones, pero su presencia desde las antiguas sociedades del neolítico hasta los despachos de presidentes y jefes de Estado de hoy en día sigue contando una historia común: la búsqueda de un sistema de poder que permita transmutar la realidad para unos fines dados, que pueden ser espirituales o a la vez políticos. Aquí un breve recuento de los magos que por una u otra razón fueron figuras históricas destacadas de su época, cuyo legado en ocasiones desborda la anécdota y la leyenda.
El escriba Flamel es el arquetipo total del alquimista: se dedicaba a la redacción de manuscritos y dejó un fascinante libro sobre alquimia. La leyenda dice que un misterioso libro escrito en código (el cual fue capaz de descifrar) le mostró las instrucciones para crear la piedra filosofal y convertir el plomo en oro.
Uno de los científicos más prominentes del siglo XIV, desarrolló investigaciones en filosofía, óptica y mecánica. Como buen renacentista, formuló también la idea de los futuros autos, aviones y submarinos del siglo XX, y afirmaba tener una cabeza robótica gigante que podía responder cualquier pregunta que se le hiciera.
Monje y erudito del siglo XIII, políglota, alquimista, astrónomo y amigo de Fibonacci, a quien ayudó a crear su célebre secuencia. Su alteridentidad era de cazador de brujas, exorcista y cazafantasmas para las cortes de varios reinos. Aparece en el Infierno de Dante, en el círculo reservado a los hechiceros.
Noble escocés que entró a la corte inglesa en 1304 y participó en la guerra de independencia escocesa de 1314. Fue ejecutado por conspirar contra el rey. Supuestamente fue alumno de Michael Scot, quien lo ayudó a domar a un ayudante mágico llamado Robin Redcap, una especie de chalán demoníaco.
Elegido rabino de Polonia en 1592, Judah fue una especie de luchador social que denunció el antisemitismo de su propia comunidad y defendió los derechos del ghetto. También creó un golem para defender Praga de los ataques de soldados romanos, un arma legendaria que cobra vida mediante la imposición de sílabas cabalísticas que permiten utilizar su fuerza --como una especie de Frankenstein judío.
Dee era consejero de la reina Isabel, Kelley era un hábil médium que podía comunicarse con ángeles, cuyo lenguaje (el enoquiano, la lengua de Adán) logró descifrar. Dee era aprendiz de Kelley y, según la leyenda, los ángeles les ordenaron intercambiar esposas.
Estuvo a punto de ser quemado en la estaca en Westfalia, por lo que decidió emigrar a Londres en el siglo XVIII. Sus muchos poderes legendarios lo hacen parecer una especie de superhéroe místico: salvó una sinagoga de las llamas al escribir una letra hebrea en una pared, no necesitaba comer y podía teletransportar objetos. También era conocido como Rabbi Hayyim Samuel Jacob Falk.
Probablemente ni siquiera tenía un título de nobleza, pero este prolífico compositor y político distribuyó historias sobre sí mismo en cortes de Inglaterra y Francia acerca de su longevidad centenaria, su conocimiento para hacer un diamante enorme a partir de diamantes pequeños y haber profetizado la Revolución Francesa.
El más cercano a nuestro horizonte temporal, Crowley sistematizó su sistema mágico a partir de las bases del Thelema, que permite a sus adeptos llamar espíritus, ver el futuro, consagrar lugares, realizar viajes astrales y desarrollar la sexualidad sagrada.
Vía io9