*

'Red', la nueva cinta de Disney Pixar, levanta polémica por hablar de la menstruación

Arte

Por: José Robles - 03/17/2022

La nueva cinta del estudio Disney Pixar ha levantado revuelo por tocar el tema "tabú" de la menstruación y sus efectos a nivel personal y social

Hace unos días, el pasado 21 de febrero, Disney estrenó en su plataforma de streaming Disney+ la cinta Turning Red, producida por Pixar, sin duda el estudio de animación más influyente y reconocido de las últimas décadas por la calidad de sus películas.

En esta ocasión, Pixar creó una película cuyo tema es la menstruación, específicamente, la primera menstruación, o menarquia, que suele ocurrir en las niñas en pubertad alrededor de los 12 años.

Por supuesto, como es habitual en Pixar (y, de hecho, en cualquier relato que destaca por su buena factura narrativa), en Red ese tema central está presentado de una manera sumamente creativa e ingeniosa, a través de la historia de Mei Lee, una niña canadiense de 13 años con ascendencia china que, de un día a otro, se descubre convertida en un enorme panda rojo. Por todas sus implicaciones –el cambio de magnitudes y de aspecto, el olor propio de un animal salvaje, la confusión derivada del cambio súbito, entre otros–, dicha transformación se convierte en la metáfora perfecta de la ocurrencia inesperada de un fenómeno que altera todos los aspectos de la vida tal y como se llevaba hasta entonces. 

Mei Lee no entiende por qué le pasa lo que le pasa (si bien sus papás sabían que eso iba a ocurrir), tampoco sabe manejar el cambio y los efectos derivados de este, y sólo poco a poco y con la ayuda de su círculo cercano (especialmente el femenino: sus amigas y su madre) se encamina en el proceso de comprensión de lo ocurrido.

Incluso contados de esta manera, el argumento y la historia de Red son hasta cierto punto muy sencillos. Por supuesto, la idea de hacer una metáfora de la menstruación a través de la transformación en un panda rojo (y acompañar ello con el simbolismo que tiene en la cultura china) es una genialidad. Sin embargo, desde otra perspectiva y examinando otro nivel de la narración la historia es en efecto sencilla porque cuenta algo que todas las mujeres han vivido desde el inicio de los tiempos, tanto a nivel anatómico y fisiológico como emocional y social. Dicho al margen, esa es también es una de las genialidades al interior de Pixar: contar historias que todos conocemos como si nunca las hubiéramos escuchado.

Con todo y tratarse de un hecho tan conocido, cotidiano y propio de lo humano, Red ha sido recibida con polémica e incluso con rechazo entre algunas personas. 

Una opinión especialmente difundida ha sido la del crítico Sean O’Connell, director del sitio Cinema Blend, quien en un texto ya inaccesible en el portal escribió:

[…] la protagonista es una adolescente empapada de hormonas que trata desesperadamente de sofocar cualquier ataque emocional para evitar convertirse en una auténtica panda. Así que, por su diseño, Turning Red tiene que poner en marcha todo el sistema nervioso para conectar directamente con la mentalidad de una muchacha. Es demasiado… La película de Turning Red exige ponerse a un nivel de "11" y mantenerse ahí. Me agotó.

Citamos esta opinión porque condensa la de muchas personas que se han expresado a propósito de la cinta en Internet. Al parecer la sola posibilidad de empatizar con la situación física y emocional de una preadolescente parece inadmisible o impensable.

Por lo demás llama la atención que todavía en nuestra época la menstruación sea un tema “tabú”, del cual no se puede hablar, que genera incomodidad o que, como en la opinión de O’Connell, parece lejano, un asunto del que sólo deben ocuparse las mujeres en su intimidad, sin molestar a nadie.

Tal vez esta película, que sin duda tendrá una gran difusión, contribuirá a ganar terreno frente a esos prejuicios.


También en Pijama Surf: "Aquí va a correr sangre": fotógrafa cuestiona la vergüenza pública asociada a la menstruación