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Estos cuervos lograron realizar pruebas tan bien como orangutanes y chimpancés

Muchos científicos y observadores casuales han sabido durante años que los cuervos son aves extremadamente inteligentes. 

La mayoría de los experimentos muestran una visión muy limitada de la inteligencia de estas aves, muchas de las investigaciones involucran ciertas actividades para probar si las aves entienden si se está escondiendo algún objeto. 

Pero un nuevo estudio trató de probar que los cuervos, incluso las crías, tienen ciertos tipos de inteligencia que pueden equipararse con las de algunos primates adultos. Simone Pika, una experta en ciencias cognitivas de la Universidad de Osnabrück en Alemania, fue la líder del equipo que condujo este experimento. 

Estos pájaros realizaron las pruebas tan bien como chimpancés y orangutanes adultos. 

En esta nueva investigación, el equipo de Pika recurrió a un grupo de pruebas desarrolladas en 2007 para investigar el rendimiento cognitivo en grandes primates y niños humanos. La coautora de este método, Esther Herrmann del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva de Leipzig en Alemania, mide el rendimiento general a través de una serie de tareas sociales y físicas en lugar de un solo aspecto aislado de otras condiciones. El método Herrmann ha sido utilizado para comparar las habilidades cognitivas entre varias especies de monos, perros y loros. 

El equipo de Pika y Herman adaptó las mismas pruebas para ocho cuervos criados por humanos. Las pruebas se dividieron en nueve categorías físicas y seis sociales, que a su vez estaban compuestas de cuatro tareas diferentes. 

Las pruebas físicas midieron las habilidades de los pájaros para rastrear objetos en un espacio determinado y para entender números. Para esto, los investigadores colocaron una recompensa debajo de un vaso, luego movieron ese vaso junto con otros para ver si los cuervos podían rastrear debajo de qué vaso se encontraba la recompensa. 

Para las pruebas sociales, se establecieron medidas para saber qué tan bien los pájaros podían seguir las pistas que los investigadores les daban. Por ejemplo, el o la investigadora señalaba el vaso donde estaba escondida la recompensa o mostraba a los cuervos cómo podían acceder a la recompensa para luego observar si eran capaces de aplicar lo que habían observado. 

El equipo aplicó estas pruebas a cada cuervo de 4, 8, 12 y 16 meses de edad. Los cuervos de 4 meses dominaron casi todas las pruebas, al punto de que sus resultados podían ser comparables con los resultados de los primates adultos que Herrmann había examinado anteriormente. 

Pika sospecha que el desarrollo cognitivo de los cuervos debe de ser muy rápido, ya que empiezan a interactuar más con su entorno social y ecológico siendo muy jóvenes (4 meses de nacidos). 

De acuerdo con Claudia Wascher, una ecóloga del comportamiento, para entender completamente la evolución y desarrollo de las habilidades cognitivas de las especies no humanas se necesitan comparaciones mucho más amplias como este estudio, y además se necesitan aplicar pruebas de ese estilo a más especies animales. 

Para esta prueba se consideró un sesgo importante: los cuervos no estaban interactuando con pares de su misma especie, sino con humanos. Aun así, los cuervos aprenden bastante rápido, y aunque los cuervos de esta investigación fueron criados por humanos, los resultados de las pruebas brindan importantes pistas para seguir comprendiendo el desarrollo de las diferentes actividades cognitivas de estas aves y cómo es que aprenden a relacionarse con especies diferentes a la suya, en este caso con humanos. 

 

Si quieres conocer más sobre este experimento, puedes leer el artículo completo en este enlace.


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Imagen de portada: Qurratul Ayin Sadia / Unsplash