En un experimento hecho por dos estudiantes de las universidades de Manchester y Newcastle, 361 hombres londinenses vieron figuras de mujeres, creadas por computadora, que podían rotar 360 grados. La tarea de los hombres era calificar su preferencia por las modelos cuya única diferencia era el tamaño de los senos.
La talla preferencial fue mediana con 37% de los votos, 24.4% de los hombres prefirieron talla grande y 19.1% talla muy grande.
Después de calificar a los cuerpos femeninos, los hombres respondieron varios cuestionarios que están diseñados para evaluar opiniones acerca de los roles femeninos, derechos de las mujeres, escalas de agresión sexual, actitud negativa frente a las mujeres, resentimiento, hostilidad indirecta, desconfianza, irritabilidad, hostilidad verbal y escalas de atracción a agresión sexual.
El estudio tuvo como objetivo descubrir relaciones entre las preferencias de las características de la figura femenina y las actitudes hacia el sexo femenino.
Las evaluaciones reflejaron que los hombres que prefirieron senos de mayor tamaño, obtuvieron puntajes altos de sexismo en las escalas de los cuestionarios.
Los resultados finales del estudio fueron discutidos en relación con teorías feministas que afirman que los ideales de belleza y las prácticas en las sociedades contemporáneas mantienen la dominación de un género sobre otro.
