Los agujeros negros, tal como los predijo la teoría de la relatividad general de Einstein, podrían no ser lo que pensábamos. Un reciente estudio propone que, en lugar de ser entidades sin estructura, podrían ser objetos cuánticos conocidos como "estrellas congeladas". Aunque similares en varios aspectos a los agujeros negros, estas estrellas congeladas carecen de singularidades —puntos de densidad infinita— y de horizontes de sucesos, lo que resolvería importantes paradojas físicas.
Una de estas paradojas es la radiación de Hawking, que sugiere que los agujeros negros emiten radiación que provoca su evaporación. Según las leyes de la mecánica cuántica, la información no puede destruirse, pero la radiación de un agujero negro no parece contener información sobre la materia que lo formó, lo que genera una contradicción. Las estrellas congeladas, al tener una estructura interna, podrían conservar esta información, resolviendo el conflicto.
A pesar de su estructura cuántica, las estrellas congeladas mimetizan casi a la perfección los comportamientos de los agujeros negros tradicionales, incluidos la absorción de materia y la emisión de ondas gravitacionales. Brustein señala que, aunque no tienen un horizonte de sucesos, las estrellas congeladas actúan como absorbentes perfectos de todo lo que cae en ellas. Además, generan la misma geometría externa que un agujero negro y exhiben propiedades termodinámicas similares
Además, estos objetos podrían comportarse de manera casi idéntica a los agujeros negros en términos de absorción de materia y emisión de ondas gravitacionales. Los científicos sugieren que la clave para comprobar su existencia está en estudiar las ondas gravitacionales generadas en colisiones de agujeros negros, ya que podrían revelar las diferencias internas entre ambos tipos de objetos..
Aunque este campo de investigación aún está en sus primeras etapas, la posibilidad de que los agujeros negros sean en realidad estrellas congeladas representaría una revolución en nuestra comprensión del cosmos. Las futuras observaciones de las ondas gravitacionales podrían aportar evidencias cruciales y permitir a los científicos explorar este nuevo horizonte teórico
Si las estrellas congeladas existen, no solo desafiarían la teoría de la relatividad de Einstein, sino que también resolverían uno de los grandes enigmas de la física cuántica, abriendo nuevas perspectivas sobre la naturaleza del universo.