*

Rilke, uno de los temperamentos más sensibles y refinados, sobre lo que hace a un artista

Rainer Maria Rilke, uno de los grandes poetas de todos los tiempos, escribió: "Ser alguien que es un artista significa: poder decir el propio ser". Esta es una definición simple y perfecta. Rilke no habla de que lo hoy en día se conoce como la autoexpresión del individuo, parte esencial de la sociedad de consumo: expresarse a través de la marca de jabón que compramos, de la ropa que usamos, de nuestras selfies, etc. El poeta se refiere a encontrar el álgebra del propio ser y decirla. El artista debe encontrar el lenguaje con el cual puede decirse a sí mismo, un decir que es ser, en el sentido del evangelio juanino, donde la palabra es "la luz y la vida del hombre":

No sería muy difícil si el lenguaje empezara con el individuo, se originara en él y de allí gradualmente se forzara a los oídos y a la comprensión de los demás. Pero este no es el caso. Por el contrario, el lenguaje es lo que todos tenemos en común, lo que ninguna persona en particular ha producido puesto que todos lo estamos produciendo, una vasta, zumbante y giratoria sintaxis a la que todos se sienten libres de añadir algo, hablando lo que es más cercano a su corazón. Y ocurre que alguien que por dentro es diferente a sus vecinos se pierde a sí mismo como la lluvia en el mar. Pues todo lo que es único en el individuo, necesita su propio lenguaje... Decir lo mismo con las mismas palabras no constituye un progreso.

Este es el asunto que concierne al artista: encontrar su propio lenguaje, volver a decir lo eterno, pero con sus propias palabras. Y entonces, debe realizar una búsqueda tanto lingüística como espiritual. Encontrar este lenguaje implica un entrar en ritmo, sintonizar la naturaleza, refinar la propia alma. 

 

* Citas de The Wisdom of Rilke, editado por Ulrich Baer

 

Lee también: El poeta no crea, sintoniza la creación (poemas traducidos de El libro de horas de Rilke)