*

En Valencia, España, un grupo de madres decidió buscar los recursos necesarios para costear el transporte escolar para sus hijos que el gobierno local se dijo incapaz de seguir sosteniendo.

Las crisis económicas contemporáneas ―provocadas en buena medida por la voracidad de los gobiernos y los grandes capitales― se dimensionan cuando generan pequeños dramas cotidianos en los que queda de manifiesto la desesperación de ciertas personas por sobrevivir en un mundo esencialmente despiadado.

Tal es el caso de varias madres en Valencia, España, que se vieron obligadas a buscar por sí mismas los recursos necesarios para suplir la falta de transporte escolar que afecta a más de ochenta niños, la mayoría de los cuales tiene que recorrer 6 kilómetros para llegar al colegio Evaristo Calatayud de Montserrat, distancia que los pequeños de entre 3 y 10 años cubren a pie o en transporte privado. Esta situación se suscitó luego de que el gobierno local, la Generalitat Valenciana, redujera el servicio público de transporte y dejara en servicio únicamente dos delos cuatro autobuses disponibles, los cuales alcanzan apenas para un centenar de alumnos.

Luego de hablar con diversas autoridades, tanto administrativas como escolares, en todos los casos sin éxito, las madres recurrieron a una medida, si no inusitada, sí sorprendente: la elaboración de un calendario erótico protagonizada por ellas mismas, imágenes que vienen acompañadas de lemas reivindicativos como "Escalaré la montaña de Montserrat para llegar al colegio'', "Autobús ya” o “Sin autobús, sin coche y sin carné, pero con mis pies y manos llegaré”.

El argumento de la Consejería de Educación es que la distancia mínima para justificar la operación de una línea de transporte escolar es de 3 km, sin embargo, las madres aseguran que tomando en cuenta los accidentes del terreno ―”Tenemos que bordear una montaña, un barranco y una carretera para llegar al colegio”, declaró una―, la distancia efectiva que recorren algunos niños puede superar los 6 km.

El calendario tuvo una tirada de 3 mil ejemplares y no tiene precio de venta, sino que las madres lo están utilizando para recolectar las donaciones suficientes que les permitan costear los autobuses que por el momento tanto necesitan.

Con información de RT y El País