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Luego de concretar la compra de Twitter, Musk realizó varias declaraciones en torno a un supuesto retorno de la libertad expresión a la red social

Hace un par de días Elon Musk tomó oficialmente control de Twitter. La llegada de Musk ha polarizado enormemente a la sociedad, dividiendo las percepciones en dos campos: los liberales progresistas que creen que son pésimas noticias, pues Twitter se convertirá en un foro de conspiraciones, discursos de odio, racismo, sexismo y demás; y los conservadores, mayormente identificados con la derecha y en Estados Unidos con los republicanos, quienes en general han celebrado la adquisición, pues creen que Musk hará predominar la libertad de expresión y detendrá la cultura de la "cancelación" woke

Lo primero que Musk hizo fue despedir al CEO de Twitter, Parang Agrawal, y a la directora de asuntos legales y encargada de moderar el contenido, Vijaya Gadde. Asimismo, tuiteó que "el pájaro está libre" y después: "la comedia ya es legal en Twitter", una referencia a la censura de ciertos temas políticamente incorrectos y específicamente cómicos que han tocado temas sensibles para comunidades marginadas o minorías sociales. Musk entró a las oficinas con un lavabo y tuiteó: "lett that sink in" ("deja que eso se hunda").

Varias personas afectadas por las políticas de moderación han celebrado la llegada de Musk, desde Kanye West hasta Donald Trump. Musk respondió un tuit de la hija del psicólogo Jordan Peterson, sugiriendo que su cuenta sería reactivada. Musk dijo: "Quien sea que haya sido suspendido por cuestiones menores y dudosas, será liberado de la cárcel de Twitter". Peterson fue suspendido por referirse al actor transgénero Elliot Page como Ellen Page. El tuit, que fue borrado por la red social, decía: "¿Se acuerdan cuando el orgullo era un pecado y los senos de Ellen Page habían sido removidos por un médico criminal?". Musk ha sugerido antes que comentarios como los de Peterson son un ejercicio de la libertad de expresión, de la cual él es "un absolutista".

Mucho se ha especulado sobre si Musk reinstalará la cuenta de Trump, pero esto puede ser más delicado, especialmente porque podría generar problemas con anunciantes en tanto que Trump está siendo investigado por las autoridades.

Algunos críticos han notado que, en este asunto, Musk se comporta de manera poco seria, errática y un tanto impredecible, como si Twitter fuera su nuevo juguete –un juguete que, cabe señalar, influye de manera importante en asuntos globales, en la opinión pública y en las emociones de muchas personas.

Musk ha intentado dar confianza a los anunciantes de la plataforma diciendo que Twitter no se convertirá en un "escaparte infernal" y ha anunciado que se llevará a cabo "un consejo de moderación" para definir las políticas de moderación. Algunas opiniones en medios como el Washington Post habían sugerido que habría una rápida diáspora de anunciantes e incluso se ha viralizado información llamando a boicotear Twitter bloqueando a los anunciantes. 

El fundador de Twitter, Jack Dorsey, ha anunciado la creación de una nueva red social que no albergará la información de los usuarios llamada Blue Sky.

Críticos de Musk han publicado gráficas que supuestamente muestran un incremento en el uso de palabras vinculadas a discursos de odio y racismo en los primeros días del cambio de dueño. Sin embargo, Musk ha respondido que no ha habido hasta el momento ninguna modificación a las políticas de moderación.


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Imagen de portada: Twitter