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Mascotas estresadas: los cambios en las rutinas pueden elevar los niveles de estrés en perros y gatos

Ecosistemas

Por: Monse Aguilar - 10/09/2021

Expertos en bienestar animal afirman que los dueños de perros y gatos transmiten el estrés cotidiano a sus mascotas

El encierro por la pandemia de Covid-19 le cobró factura a nuestras mascotas. Millones de personas abandonaron la oficina y crearon espacios de trabajo domésticos para adaptarse a la vida pandémica. La tensión de vivir en el encierro ha llevado a un importante aumento de personas que buscan ayuda con su salud mental y, de manera inevitable, esos cambios afectan también a nuestros perros y gatos, aunque de distintas maneras. 

 

Grumpy cats o Gatos vs humanos

En un nuevo estudio realizado por la Universidad James Cook, aproximadamente la mitad de los dueños de gatos informaron que sus gatos estaban "molestos" por su mayor presencia durante el período más amplio de encierro por la pandemia. En el estudio se encuestó a casi 400 personas que vivían solas durante el confinamiento y analizó cómo la propiedad de una mascota interactuaba con los niveles informados de atención plena, depresión y ansiedad. Se descubrió que el simple hecho de tener un perro era suficiente para mejorar el estado de ánimo de los dueños, pero que los gatos no reflejaban necesariamente el afecto de sus propietarios.

Por su parte, la asociación Cats Protection dijo que muchas mascotas estaban luchando para hacer frente a la convivencia con sus dueños durante el día. "Parece que algunos gatos se han estresado más ​​durante la pandemia", dijo una portavoz.

El estudio fue dirigido por la profesora y doctora en psicología Jessica Oliva, quien señaló que el encierro constituyó una de las primeras veces en que los dueños de mascotas tuvieron la oportunidad de experimentar cómo es un día en la vida de sus compañeros peludos. Aunque nuestras mascotas suelen vivir en condiciones lujosas porque tienen una cama cálida, juguetes para divertirse o raciones de comida segura, carecen de libertades que los seres humanos también perdimos durante el encierro, como ir y venir a placer, socializar o hacer deporte. 

La Dra. Oliva comenta que, contrario a los dueños de gatos, los dueños de perros informaron sentir un nivel reducido de soledad:

Un perro era una excusa para salir a la calle y hacer ejercicio y proporcionaba esa rutina, y hacerlo brindaba la oportunidad de socializar con otras personas que hacían lo mismo. No lo vemos en los dueños de gatos.

Oliva advirtió que los viajes no siempre estarán restringidos y que en el futuro las personas podrían pasar menos tiempo trabajando desde casa, por lo que deben asegurarse de poder cuidar a una mascota durante toda su vida. Si bien es genial que muchos gatos y perros hayan sido adoptados en el comienzo de la pandemia, esta debería ser una decisión muy bien pensada que refleje el compromiso de cuidar y enriquecer la vida del animal. 

 

Humano estresado, perro estresado

Según un nuevo estudio de la Universidad de Linköping, el estrés de los perros y sus dueños suele estar ligado. Los científicos creen que los perros reflejan el nivel de estrés de su dueño, y no al revés. Dicho estudio ha sido publicado en la revista Scientific Reports

El artículo sostiene que el contagio emocional, el reflejo de estados emocionales o de excitación entre individuos, se ve comúnmente entre las especies que viven en grupo, por ejemplo, como una sincronización de respuesta al estrés agudo. Los animales sociales, que pasan tiempo juntos, están continuamente expuestos a factores estresantes compartidos que podrían afectar a diferentes individuos de manera similar. Asimismo, se ha sugerido que el estrés es altamente contagioso en individuos de la misma especie.

El contagio emocional no solo ocurre dentro de una especie sino entre especies, por ejemplo entre perros y humanos, lo que hace que la relación perro-humano sea un buen modelo para estudiar este fenómeno. Los perros y los humanos son dos especies sociales que comparten una relación única como resultado de vivir en estrecha asociación. Hoy en día, la mayoría de los perros viven como animales de compañía, compartiendo tanto el entorno como la vida cotidiana de sus dueños humanos. De acuerdo con las mediciones de rendimiento cognitivo, entre ambas especies puede haber contagio del estrés, pero igualmente se ha demostrado que las respuestas de cortisol a corto plazo aparecen en los vínculos perro-humano durante la realización de deportes caninos.

El hecho de que el estrés a corto plazo sea contagioso y que los perros comparten la vida cotidiana de sus dueños podría conducir a una sincronización interespecífica de la hormona del estrés a largo plazo dentro de la díada. Mientras que los niveles agudos de cortisol pueden evaluarse en matrices como sangre y saliva, una matriz prometedora para analizar la concentración de cortisol a largo plazo es el cabello. A medida que crece el cabello, el cortisol de la sangre se incorpora gradualmente, formando un calendario retrospectivo de concentraciones de cortisol. 

grumpy_dog

En conclusión, en ambos estudios se examinó cómo los niveles de estrés en los perros y la incomodidad de los gatos se ven influenciados por factores del estilo de vida y por las personas que viven con ellos. Así que, de vez en cuando, no está mal dejar descansar un rato a nuestras queridas mascotas. 


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Imagen de portada:  傅甬 华 / Unsplash