¿A qué se refiere el término 'Anáhuac', un país, un continente, una cuenca cultural?
Filosofía
Por: Alejandro Massa Varela - 06/06/2024
Por: Alejandro Massa Varela - 06/06/2024
El término “Mesoamérica” fue introducido por el etnólogo y filósofo alemán, naturalizado mexicano Paul Kirchhoff. Una súper área con una historia de interacción y un núcleo duro cultural compartido por varios pueblos dentro de un proceso de mestizaje.
Esta enorme área prehispánica sustituida por México y el norte de Centroamérica influye hasta el centro de los Estados Unidos, las islas orientales del Mar Caribe, la costa de Venezuela y el norte de Colombia. Sus genealogías humanas más remotas se pierden en la cultura madre olmeca en la confluencias de los actuales estados de Veracruz y Tabasco. Se trata de un pensamiento concebido con la tierra , sin edad conocida y sin fronteras rígidas.
No siendo un país o un Estado nación en el sentido de la historia europea, en el ámbito de la mitología nahua nacida en la Huasteca, “Anáhuac” es el nombre para el universo conocido, el lugar de la agencia y la imaginación humanas . Podría haber tenido otro nombre para los toltecas del período Clásico, un nombre para lo que sea cultura, “Toltecáyotl”, el desarrollo humano desde el origen de la agricultura, la inteligibilidad y la esencia universal.
Esta universalidad móvil, como una antorcha de pueblo a pueblo, siglo a siglo, es la Anáhuac que llega a ser vista una vez que se vuelve una manera de habitar por quienes despiertan a sus principios filosófico-culturales-religiosos. Las y los nahuas la usaban para hablar de su casa mental o “logológica”, identificada con su casa topográfica, el territorio circundante al lago de Texcoco o también a la costa del Golfo de México. Hasta donde acaban los límites del mundo, es decir, hasta donde acaban los límites de un lenguaje, apalabramiento de lo conocido .
Anáhuac es una castellanización de “Anawak”, palabra traducible como rodeado de agua o en torno al agua , de acuerdo con el misionero franciscano Toribio de Benavente o “Motolinia”. Un continente que acaba donde ya no se ve la tierra por el mar y el silencio. Un país, el país nahua que se encuentra donde se hable la lengua nahua que crea el cosmos , donde este cosmos piense y reduzca sus energías a una forma humana. La tierra que rodea el lago del Valle de México, la tierra “anahuaca”, gentilicio náhuatl dicho de otro modo por las culturas circundantes.
El también franciscano Bernardino de Sahagún identificaba a Mesoamérica con las maneras de decir, pensar y sentir Anáhuac por quienes fueron llamados “indios” desde el siglo XVI. Sintetizó su historia o su mito en el Códice Florentino , un documento con el que pretendió informar a Europa sobre lo descubierto en el Nuevo Mundo, un viejo universo:
Cuando salieron de Tulla se fueron hacia el oriente; de ellos descienden los que al presente se llaman Anahuacas Mixtecas… A aquellas provincias que están hacia la mar del sur (Océano Pacífico) les llaman Anahuaca Tlalli, tierras de Anáhuac… Recibían (los mayas a los mercaderes nahuas) a la mitad del camino, y de allí los llevaban hasta su tierra, que es Anahuac Xicalanco (tierra que se curva entre las aguas, la península de Yucatán). En cuanto llegaban a la provincia de Anáhuac Xicalango, los mercaderes daban a sus señores lo que enviaba el señor de México.
El investigador Frank Díaz agrega:
Anáhuac no es un país en el sentido moderno, carece de fronteras políticas rígidas. Es una cuenca cultural con epicentro en la zona de asentamiento olmeca (la confluencia de los actuales estados mexicanos de Veracruz y Tabasco). Tuvo influencia plena sobre el norte de Centroamérica y México, pero sus motivos culturales se extendieron hasta el centro de los Estados Unidos, las islas orientales del Mar Caribe, la costa de Venezuela y el norte de Colombia.
Anáhuac es lo que ahora llamamos Mesoamérica y el término nos remite a un pasado lleno de esplendor. Usar este término recupera un sentido auténtico de conexión con ese pasado.
Con información de la Universidad Tolteca