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Además Twitter podría empezar a cobrar una cuota a empresas y gobiernos e implementar una función para editar tuits

Elon Musk ha dicho que la principal razón por la que compró Twitter es por su intención de defender la libertad de expresión. En ese sentido, Musk se llama a sí mismo un "absolutista". Muchos de los cambios que piensa hacer van en dos direcciones: promover la libertad de expresión y monetizar mejor esta plataforma.

Con el anuncio que de que compraría Twitter se empezó a especular si esto significaría que Trump regresaría a esta red social. Trump fue expulsado de Twitter luego de haber incitado a la violencia desde su cuenta, lo que contribuyó a la toma del Capitolio a principios de 2021.

Hace un par de días Musk anunció que le abriría las puertas a Trump. "No creo que fue correcto vetar a Donald Trump, creo que fue un error. Yo revertiría este veto permanente", dijo durante la conferencia del Financial Times. "Vetar a Trump de Twitter no acaba con su voz, la amplifica entre la derecha y es por eso que es moralmente un error y estúpido en última instancia".

Las declaraciones de Musk han generado críticas entre expertos y activistas liberales. Algunos creen que la medida hará que muchas personas abandonen Twitter o se pongan en contra del nuevo dueño, particularmente quienes creen que existe un exceso de desinformación y teorías de conspiración en esta red social. Si Trump es admitido, ello podría abrir la puerta para otros personajes sancionados, como Alex Jones o Dvid Icke, quienes promueven teorías de conspiración todavía más radicales. Asimismo, podría propiciar que las agencias regulatorias tomen otro tipo de medidas. Musk señaló en la misma conferencia que una mejor solución podría ser suspender las cuentas temporalmente o eliminar ciertos tuits.

La decisión de Musk, que depende de que se finalice la compra, obligaría a Trump a tomar una decisión difícil. A partir de que fue expulsado de Twitter, Trump ha apostado fuertemente por una nueva red social llamada Truth Social.  Al parecer Trump logró recaudar más de mil millones de dólares para esta red social que hasta la fecha no ha tenido mucho éxito, con sólo 3 millones de usuarios activos. Trump ha dicho que no está interesado en volver a Twitter. Pero ante la posibilidad de regresar a la presidencia en 2024, los más de 300 millones de usuarios activos de Twitter pueden hacerle cambiar de opinión. 

Por otro lado, Musk ha anunciado que podría empezar a cobrar una cuota a empresas y gobiernos que usen Twitter, sin que esto afecte a los usuarios individuales.

Musk ha sugerido que acabará con los spam-bots y los "cryptoscammers", probablemente obligando a que las cuentas sean verificadas. Otra de las medidas controvertidas que podría implementar es un botón para editar los tuits, yendo en contra de una de las características que han definido a esta red social desde sus inicios. Esto podría ser un problema cuando una persona edita un tuit que otras personas ya han republicado. No obstante, es algo que existe en Facebook. 

Algo que ha sido mejor recibido es su intención de abrir el código del algoritmo de Twitter. Esto permitiría que las personas entendieran qué es lo que hace que un tuit sea promovido y evitaría la manipulación interna. 


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Imagen de portada: Strait Times