*

Este video muestra cómo los perros utilizan su increíble sentido del olfato para ver el mundo

Por: Jimena O. - 12/28/2015

Los perros pueden oler enfermedades, detectar emociones, saber que una persona está embarazada e incluso viajar al pasado con su extraordinario sistema olfativo

[CC, subtítulos en español]

Este video te sorprenderá con el nivel de precisión y complejidad que tiene el olfato de un perro, algo que nos hace comparativamente discapacitados para navegar el mundo.

La neurobióloga Alexandra Horowitz explica cómo los perros realmente alcanzan a tener una riqueza sensorial con el olfato comparable con la forma en la que nosotros vemos el mundo. Si bien para nosotros los olores son casi siempre sólo detectados cuando marcan algo excepcional --bueno o malo-- para los perros son el flujo constante de información que crea una nítida imagen del mundo. Los perros huelen en alta definición y calidad estéreo, pudiendo determinar la dirección exacta de donde viene un olor. Sus narices dividen el aire en dos, uno para respirar, otro para oler. Su sistema olfativo consta de 300 millones de receptores, a diferencia de sólo 5 millones en los humanos; usan sus exhalaciones para recircular corrientes de olores. Ante esto, no debe extrañarnos que el sistema olfativo ocupa mucho mayor espacio en el cerebro de los perros, y es por eso que pueden recordar miles de olores distintos.

Un perro podría oler un perfume individual en un estadio de futbol y distinguir sus componentes, algo que nosotros sólo podríamos hacer en una habitación cerrada. De hecho un perro puede oler cada árbol, ave, auto o persona en una calle, proporcionando el mismo nivel de información que nuestra visión recoge de una escena. El sistema vomeronasal les permite detectar hormonas que les sirven para identificar potenciales parejas, hostilidad en animales, estados emocionales de un individuo o cosas como el embarazo e incluso el cáncer. Así que los perros pueden "ver" algunas cosas con su olfato que para nuestros ojos son invisibles.

Y quizás lo más asombroso es que pueden viajar en el tiempo a través del olfato: el pasado surge en estelas de olor, concatenaciones de diversos estados olfativos distintivamente superimpuestos con los que se enteran de lo que has hecho, con quién has estado o cómo te has sentido y qué has comido; un perro huele toda una historia. Verdaderamente, los perros y sus olfatos son maravillas dignas de contemplarse y adorarse.