Dale un arma a un hombre y podrá robar un banco.
Dale un banco a un hombre y podrá robar el mundo.
Banksy
A estas alturas no se necesita un gran despliegue de sensatez o sapiencia para darnos cuenta de que el actual sistema financiero está no sólo plagado de vicios, sino esencialmente mal diseñado –esto si consideramos la igualdad y la justicia como criterios primordiales. Pero hace mucho que la denuncia dejó de ser suficiente, y lo que hoy se requiere son alternativas viables que puedan reemplazar o al menos debilitar gradualmente a este sistema.
Recién se ha consumado una alianza entre dos entidades financieras del Reino Unido que proponen explorar un nuevo modelo de préstamos bancarios. Recordemos que los bancos, y sus créditos, son actores protagónicos del aberrante escenario económico que nos rige. A grandes rasgos se trata de un acuerdo establecido entre un nuevo banco, el Metro Bank, y Zopa, una plataforma digital que habilita créditos mediante un esquema de peer to peer (es decir, un usuario conectado a esta red presta dinero a otro usuario) y que, al parecer, es utilizada para mover millones de libras esterlinas cada mes.
Actualmente un banco recibe el dinero que sus clientes ahorran y lo presta a otros clientes que solicitan un crédito. Los intereses que cobra en esta movida son suficientes para compensar a los ahorradores y luego obtener jugosas ganancias por intermediar. El éxito de Zopa se debe a que suprime la figura bancaria como un intermediario de préstamos y básicamente se limita a cobrar una comisión por enlazar a dos personas: un potencial prestador y un prestatario. Obviamente la comisión de Zopa es mucho menor a los intereses que nos cobran los bancos, y ahí radica su principal ventaja competitiva. Además, las transacciones relativamente se humanizan y la dinámica apela más a una noción comunitaria que a una relación sodomita entre una sombría institución y una persona.
Por su lado Metro Bank, fundado en 2010, se ha caracterizado por promover una nueva filosofía en la relación cliente-banco, y se ha distinguido por desafiar a los grandes bancos (a quienes incluso ha considerado como un gran cártel, en alusión a su mafioso proceder).
Pero la noticia importante es que tras esta alianza Metro Bank se incorporará como cliente de Zopa junto con su cartera de clientes, lo cual provocará un aumento sustancial en el volumen de transacciones que procesa Zopa. Esto podría traducirse en un crecimiento masivo de adeptos al nuevo esquema lo cual, sin duda, debilitaría a los grandes bancos de este país y los obligaría a repensar sus procedimientos actuales. Finalmente, el éxito de esta alianza sugeriría una alternativa palpable al actual modelo bancario y podría ser replicada en otros países.
En el comunicado emitido por ambas compañías se advierte:
Zopa y Metro Bank consideran que esta alianza es un gran ejemplo de cómo dos desafiantes y disruptivos actores financieros pueden colaborar para ofrecer un valor adicional y revolucionar el sector bancario del Reino Unido.