No hay duda de que Apple hace buenos gadgets, pero en lo que se refiere a su calidad humana, las cosas son distintas. Hace unas semanas reportamos sobre las condiciones de explotación infrahumana en la que viven los trabajadores en China que fabrican los iPads, también sobre la tecnología que tienen los iPhone para almacenar todos tus movimientos en un archivo ocultó, su patente de tecnología para espiar a sus usarios e incluso cómo Apple se ha convertido en una especie de religión del consumo. Ahora vemos una muestra del mercantilismo recalcitrante que alimenta a las grandes corporaciones con la aplicación de una patente de la empresa de la manzanita para impedir que las personas graben eventos deportivos y conciertos.
Apple está trabajando en una tecnología que bloquea la cámara de un iPhone a través de sensores infrarrojos que pueden ser instalados en cualquier foro de conciertos o estadio deportivo, manteniendo en operación, sin embargo, las otras funciones del teléfono.
Este software está planeado para proteger los intereses de los organizadores de eventos y de las televisoras que los transmiten, que no quieren que las personas puedan subir las imágenes de sus espectáculos exclusivos a YouTube y otros sitios Internet. Esto también permitirá a Apple llegar a tratos favorables con las disqueras en su negociación para vender contenido a través de iTunes.
[Fox News]
