*

Nuestros niveles de atención son cada vez menores. Desarrolla tu capacidad de atención profunda con estos ejercicios para el día a día

Es paradójico, pero en la llamada era de la información, una de las cualidades más escasas es la atención. Impregnados de tantos estímulos, muchos de ellos, incluso resultado de estudios neuropsicológicos y aplicados mayormente a la mercadotecnia, nos roban la atención llamada bottom-up (el tipo de atención que nos atrapa cuando escuchamos un ruido o una notificación). Este es el tipo de atención que nuestro organismo usa como mecanismo de defensa para el peligro, por ejemplo.

Entonces, como estamos tan estimulados, en realidad es cada vez más difícil centrar nuestra atención en algo. Como ejemplo, jamás en la historia habíamos tenido acceso a un dispositivo parecido a los teléfonos móviles. Si bien en el siglo pasado los aparatos comenzaron a poblar nuestra realidad, eran extensiones más lejanas; ahora, los móviles parecieran extensiones de nuestro propio cuerpo. Sus notificaciones constantes son un gran distractor; también la sorprendente necesidad de revisar las redes sociales, o bien, la compulsividad de mantenernos (sobre)informados.

Y en este mundo de estímulos y distracción, lo más importante para recuperar la atención es hacer consciente que, aunque pareciera que somos multitasking, no es así, y en realidad no estamos concentrados. Una vez racionalizado esto existen algunos métodos que pueden ayudarte a estar enfocado, verdaderamente enfocado, lo más posible, en tu vida diaria:

 

Desintoxícate de lo digital, aunque sea una vez por mes

Si no te das el momento de sentir la diferencia, no la notarás. Por ello es imprescindible que cada cierto tiempo (de preferencia una vez al mes como mínimo) dejes los aparatos y te desintoxiques, tanto para que descubras tu grado de adicción como para que experimentes cómo luego de unas hora puedes comenzar a sentir más la vida que pensar en publicarla (¿presumirla?).

 

Medita

La meditación mindfulness es una de las bondades milenarias de Oriente que te ayudarán a desarrollar tu atención plena, volviendo a lo más básico, lo más sencillo y universal: la respiración.

 

Trabaja por lapsos y toma descansos

Según algunos estudios, es más fácil que tu mente se concentre si trabajas por lapsos de unos 52 minutos, y luego descansas 17. De este modo podrás relajarte, pero luego de verdaderamente haber avanzado en lo que estabas haciendo.

 

No existe el multitasking

Cuando crees que eres capaz de hacer atentamente una multiplicidad de cosas simultáneas, en realidad no es verdad. Lo que estás haciendo es una especie de focalización aparente, muy breve, cada ciertos segundos. No, no estás poniendo atención a nada, lo dicen distintos estudios en la materia.

 

Escucha

Desde que los dispositivos están entre nuestras vidas sociales, ¿te has preguntado cuándo fue la última vez que verdaderamente escuchaste cada palabra de alguien con quien saliste a un café?, ¿cuántas veces durante la conversación no pensaste en checar tu teléfono o en ver si tuviste likes, o simplemente en tomarlo? Vuelve a tus relaciones, disfruta verdaderamente el tiempo con las personas que quieres. Una manera para iniciar esto es simplemente escuchando.

 

Lee

Leer favorece procesos de aprendizaje y atención desde que eres niño. Cuando lees, tu mente tiene que “dibujar" las imágenes. De este modo, tu atención está plenamente ahí, ya que de lo contrario la actividad de la lectura deja de ser placentera. Leer es una excelente manera de entrenar tu mente, cada día, para fijar la atención.

 

Teje

Incluye esta milenaria actividad entre las tuyas, seas hombre o mujer. Además de que tu cerebro arrojará dopamina (y por ello es sumamente placentero), te relajarás y luego de hacerlo serás mucho más propenso a realizar con atención lo que te hace falta.