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Investigadores japoneses registraron la gestación de un planeta llamado "TW Hydrae"

Dentro del ciclo interno de la vida y la muerte, auspiciado por la ley universal de la impermanencia, el nacimiento es un momento crucial de nuestra realidad. Y si de nacimientos se trata, seguramente pocos liberan más energía que la de un planeta cuando emerge. Por eso es que el registro del nacimiento de uno, recién capturado por un grupo de astrónomos japoneses desde Chile, es tan impactante. 

Más allá de las cualidades estéticas de la imagen, el simple hecho de presenciar la gestación de un planeta tiene algo de maravilloso. En este caso se trata de un gigante de hielo, ubicado a 176 años luz de la Tierra. Con apenas entre 5 y 10 millones de años, este planeta llamado "TW Hydrae", y que se ubica en la constelación de Hidra, es casi del tamaño del sol (tiene un 80% de su masa). Y además de su cercanía y su tierna edad, el hecho de que esté de cara a la Tierra hace de este cuerpo el mejor para contemplar y estudiar la formación de un planeta.

La imagen fue captada desde el observatorio más potente del mundo, el Atacama Large Millimiter/submillimiter Array (ALMA):