En 2014 se plantaron mil árboles en Nordmarka, un bosque en las afueras de Oslo. Cien años después estos árboles darán vida a una selección exclusiva de libros. Este es el bosque más joven de Noruega; los árboles apenas alcanzan 1 m de altura, pero se espera que lleguen a crecer hasta unos 30 m más.
Durante estos cien años, autores de todo el mundo escribirán y donarán obras literarias que nadie podrá leer hasta el año 2114. Este proyecto, además de ser una apuesta a los lectores del futuro, es también un ejercicio de preservación de la naturaleza.
Las siembra de estos árboles empezó en junio de 2017. La idea es que cada árbol sembrado dé vida a un manuscrito de un autor o autora dentro de un siglo. Cada árbol del que se obtendrá el papel para la publicación de un libro está marcado con un listón rojo, que lo distingue de los demás árboles que forman parte del bosque.
La Biblioteca del Futuro es una obra viviente y orgánica; cada año, las palabras aún no escritas se irán materializando para que una vez pasado un siglo, los futuros lectores vean culminado un esfuerzo dedicado a ellos.
Los manuscritos de los autores que participan en este proyecto serán resguardados en una habitación diseñada exclusivamente para este proyecto en la Biblioteca Deichman de Oslo. “El cuarto del silencio” está diseñado sólo para la contemplación y fue hecho con la madera proveniente del bosque Nordmarka. El hecho de que sea sólo para la contemplación es un recuerdo de la paciencia y la belleza de ver el bosque crecer año con año. En esta habitación se encuentran los nombres de los autores en pequeños cofres de madera; cada uno contiene el manuscrito que será impreso y publicado en 2114.
Los autores tienen prohibido revelar de qué tratan sus manuscritos; lo único que podemos saber son los títulos.
Los libros que se publiquen en 2114 serán un testimonio de la relación del ser humano con el tiempo, la naturaleza y la lectura, así como de la importancia del cuidado y la preservación.
Hasta el momento, el proyecto cuenta con autores como Margaret Atwood (quien fue la primera en escribir una historia llamada Scribbler Moon), el inglés David Mitchell, el turco Elif Shafak, el poeta islandés Sjón, Han Kang de Corea del Sur y el poeta vietnamita-estadounidense Ocean Vuong.
Una de las bellezas de este proyecto es que autores que aún no han nacido también participarán contribuyendo con sus manuscritos, en un recordatorio más de que el mundo no acaba con nosotros, los que vivimos en el presente.
El proyecto tiene pensado invitar a autores de todos los géneros, creando así un testimonio del tiempo presente y, dentro de cien años, del pasado.
La creadora de esta obra es la artista escocesa Katie Paterson, cuyo trabajo gira en torno al lugar de los seres humanos en un mundo que vive uno de los cambios más abruptos y rápidos en la historia de la humanidad.