Por iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas (a través de su Departamento de Información Pública), desde 2010 cada 23 de abril se conmemora el Día del Idioma Inglés.
La elección de la fecha obedece a una coincidencia un tanto legendaria, pues con cierta licencia poética o histórica se suele decir que William Shakespeare (sin duda el referente más alto de la lengua inglesa) nació y murió el mismo día de diferente año, un 23 de abril.
Sin embargo, esto es sólo parcialmente cierto, pues si bien el nacimiento del Bardo se ha asignado por convención el 23 de abril de 1564 (a partir de un acta de baustimo fechada el 26 de abril) y de su muerte se sabe que ocurrió, en efecto, un 23 de abril de 1616, pero de otro calendario. En el momento del fallecimiento de Shakespeare, por razones políticas la Corona inglesa había determinado un cambio al calendario juliano, para diferenciarse así del calendario gregoriano que seguían prácticamente todos los países de la Europa continental (y, más específicamente, los países católicos aliados de El Vaticano). En el calendario gregoriano, que es de hecho el que seguimos en la actualidad, Shakespeare murió realmente un 3 de mayo de 1616.
Como sea, dicha peculiaridad dio pie a elegir el 23 de abril como el día de celebración del idioma inglés. En el caso de la ONU, la efeméride también se instauró como parte de la conmemoración de los seis idiomas oficiales de la organización, a saber, además de este, el árabe, el chino, el francés, el ruso y el español.
Como dato curioso cabe mencionar que el español y el inglés comparten fecha de festejo porque, en otra coincidencia histórica, el 23 de abril de 1616 (este sí del calendario gregoriano) falleció Miguel de Cervantes, quien por haber escrito el Quijote suele considerarse el autor que, con su obra, dio al español el estatuto de idioma cabalmente formado.
A manera únicamente de invitación compartimos este video que recupera una puesta en escena del Coriolano de Shakespeare, en este caso interpretado por Tom Hiddleston. Se trata de un montaje novedoso y sumamente original que quizá despierte en más de uno no sólo el interés por las obras del Bardo, sino por todas las expresiones culturales que existen en dicho idioma.
Imagen de portada: Coriolanus, National Theatre
