¿Los tatuajes son responsables de infecciones aún 15 años después de hacértelos?
Salud
Por: Juan Pablo Carrillo Hernández - 10/11/2017
Por: Juan Pablo Carrillo Hernández - 10/11/2017
El tatuaje, como arte milenario en numerosas civilizaciones y sociedades, se ha convertido en un objeto de moda entre jóvenes y adultos de distintas partes del mundo. Con diseños pequeños, elegantes y con símbolos que intentan reflejar la paz mental, los tatuajes en la actualidad forman parte de la cotidianidad. Sin embargo, ¿todos los cuerpos tatuados pueden adaptarse a la tinta permanente?
De acuerdo con un estudio publicado en Annals of Internal Medicine, los tatuajes pueden causar infecciones 15 años después de haberse realizado. La investigación comenzó con un caso en el Royal Prince Alfred Hospital, en Sydney, Australia, en donde se pensó que una mujer de 30 años podría tener cáncer después de notarse unos bultos en la axila; no obstante, al remover la piel, se descubrió que la zona no estaba dañada realmente. Tras descartar otras posibles causas de los bultos, los expertos concluyeron que se trataba de una reacción ante un tatuaje que se había hecho 15 años antes.
La hipótesis de los doctores se enfoca en la travesía de la tinta del tatuaje hacia los nudos linfáticos, una zona usada por el cuerpo para limpiar las toxinas que hay en su interior y cuya reacción puede suceder incluso una década después de haberse tatuado. La investigación estuvo a cargo de la European Synchrotron Radiation Facility (ESRF), en donde se señaló que las nanopartículas tóxicas de dióxido de titanio en la tinta del tatuaje pueden viajar al interior del cuerpo, acumularse en los nudos linfáticos y causar una seria infección con el paso del tiempo.
Por esta razón, la ESRF incita a no sólo enfocar la atención en el local o el tatuado con quien se desea que impregne el diseño sobre la piel, sino también en el uso de agujas estériles –que no se han utilizado con anterioridad– y la composición química de los colores. Según Hiram Castillo, una de los autores del estudio y científica en la ESRF, existen algunos estudios previos que indican el impacto tóxico de la tinta como resultado de la presencia de preservativos y contaminantes como el níquel, cromo, manganesio o cobalto. Si los pigmentos del tatuaje viajan hacia los nudos linfáticos, son estos mismos los que no sólo cambian de color al diseño, sino también los que terminan por recibir el impacto. En consecuencia, el cuerpo intenta limpiar la entrada del tatuaje mediante una infección que requiere atención médica de urgencia. Las preguntas que quedan por resolver están relacionadas con el impacto a corto, mediano y largo plazo de las nanopartículas en las células…