El alcohol es una de las sustancias más dañinas sobre la Tierra. Se estima que, cada 10 segundos, muere un bebedor. Sin embargo, se trata de años de desgaste físico y neurológico. Más allá de los beneficios sociales y los estigmas morales asociados a su consumo el alcohol es una droga, y su consumo inmoderado la vuelve una de las más peligrosas para el cuerpo.
El doctor Samuel Ball del Centro Nacional de Adicciones y Abuso de Sustancias en la Universidad Columbia describe algunas consecuencias conocidas (cirrosis hepática) y no tan conocidas (pérdida de función motora) del consumo de alcohol.
Las enfermedades y padecimientos asociados al consumo crónico de alcohol son:
Después de todo, parece una especie de contradicción decir "salud".