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Las cuevas de este glaciar son una de las formas más alucinantes de viajar en el tiempo (FOTOS)

Por: Jimena O. - 12/18/2014

Quizá la naturaleza abre cámaras de maravillas justo antes de extinguir algo por completo

Un glaciar, literalmente, es tiempo congelado. Es como ver una estrella (que posiblemente se desintegró hace milenios), pero lo podemos tocar. O mejor aún, podemos entrar a su alucinante vientre. Estas cuevas del sur de Alaska son a la vez túneles de tiempo –agua que quedó paralizada en su transcurrir– y un golpe de frescura submarina.

Para llegar a ellas hay que remar en un kayak y luego escalar el hielo del glaciar. Pero como buena manifestación del tiempo, se nos está yendo de las manos. El glaciar Mendenhall, que tiene 20km de envergadura, disminuye mientras lees esta nota. Desde 1958, ha retrocedido 3km. Las cuevas, sin embargo, son producto de su decadencia.

Quizá la naturaleza abre cámaras de maravillas justo antes de extinguir algo por completo. Este glaciar produce increíbles nuevos paisajes mientras lo vemos derretirse poco a poco.