El economista y profesor francés Jean Tirole, de 61 años, ha recibido el Premio del Banco de Suecia en Ciencias Económicas en memoria de Alfred Nobel (conocido popularmente como el Nobel de Economía) por el importante análisis que ha realizado sobre "la potencia del mercado y la regulación", así como para prevenir a los gobiernos, en su papel de reguladores, sobre el fomento de prácticas monopólicas en las grandes corporaciones.
“La mejor regulación o política en materia de competencia debe ser cuidadosamente adaptada a las condiciones específicas de cada sector. Jean Tirole ha presentado un marco general para concebir esas políticas y las ha aplicado a diversos sectores, que van desde las telecomunicaciones a la banca”, destacó la academia sueca.
Antes de los análisis de Tirole sobre monopolios utilizando la teoría de juegos, los reguladores y gobiernos aplicaban límites de precios para compañías monopólicas, lo que a la larga podía generar deficiencias en la calidad de los servicios.
Tirole apoya la liberalización y privatización de servicios públicos pues para él la competencia puede generar menores precios, impactando positivamente a los consumidores; sin embargo, su trabajo también prevee que, en un mercado de empresas globales, los gobiernos deben establecer autoridades globales para supervisar su funcionamiento.
"Si se los deja sin regular, esos mercados usualmente producen resultados indeseados por la sociedad: precios más altos que los motivados por los cotos o empresas improductivas que sobreviven bloqueando el ingreso de otras nuevas o más productivas", dijo Tirole en alguna ocasión. Su análisis tampoco ha sido ajeno al papel de Google y otras grandes corporaciones de prácticas monopólicas en entornos web.
Algunos economistas han advertido que una lectura más atenta del trabajo de Tirole pudo haber prevenido o minimizado los efectos de la crisis económica de 2007, al plantear recomendaciones sobre la función de los reguladores para minimizar el riesgo en mercados donde los participantes (como en el caso de los bancos) están estrechamente interconectados.
Tirole también ha dicho que “Francia necesita modernizarse para dar más oportunidades a los jóvenes”, a la vez que es necesario “modificar el mercado de trabajo" para ayudarlos.
Este premio fue establecido en 1968 y entrega 1.1 millones de dólares al ganador, siendo Tirole seis años más joven que el promedio de ganadores, y el primer no estadounidense desde 1999.