Cuando las marchas, los plantones y las protestas parecen desgastadas para exigir a las autoridades, la imaginación es la musa. Hace unas semanas publicamos sobre una creativa protesta en el senado de México por una ley que amenazaba la libertad de expresión. Con un aparato, los ciudadanos bloquearon las señales de celular de los legisladores, en un persuasivo acto metafórico.
También ciudadanos de la ciudad de Xalapa, Veracruz, montaron este sábado una expresión de exigencia social por demás poética. Integrantes del Movimiento Social en Favor de la Honestidad Municipal, hartos de los agujeros en las calles, que entorpecen la vialidad y peligran a la sociedad, iniciaron un proyecto de siembra de baches.
El proyecto “En Xalapa florecen los baches” rellena con tierra y siembra con rosas los hoyos en el asfalto. El resultado se ve increíble, como una escena donde se imponen decenas de jardineras que quieren recuperar el paisaje.
En una calle de 200m, los participantes contaron más de 50 baches, e intentan llamar la atención del ayuntamiento para que concrete uno de los trabajos más básicos para que funcione una población: la salud de sus vías públicas.
El proyecto recuerda al trabajo del artista británico Steve Wheen, quien en una intevención previa había adornado los huecos en calles y banquetas de minimundos de vegetación, más con fines estéticos que sociales, como en el ensoñador caso de Xalapa.