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¿Los ciudadanos organizados son más efectivos que el gobierno? El caso de Michoacán, México

Por: Ana Paula de la Torre - 10/30/2013

Las leyes y el estado pierden sentido cuando son incompetentes, en Michoacán las cuestionadas policías comunitarias han disminuido la violencia ante la incapacidad estatal, asegura una carta del Arzobispado de Apatzingán

 

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Desde finales del sexenio del ex-presidente Vicente Fox (2000-2006), el estado mexicano Michoacán ha sido campo de batalla entre grupos del crimen organizado. Los Caballeros Templarios, principalmente, han sembrado frustración y miedo entre los michoacanos, mediante una indiscriminada extorsión y, como si viviéramos en un país carente de gobierno, estos criminales permanentemente amenazan la vida de los habitantes.

Para recuperar la seguridad de la entidad, en mayo pasado el actual gobierno desplegó elementos del Ejército, la Marina y la Policía Federal. Sin embargo, la violencia persiste. Desde la cámara de diputados y el senado se cuestiona al gobierno federal por permitir la existencia de los grupos de autodefensa (ciudadanos armados que, ante la violencia de sus localidades y un gobierno omiso, están autodefendiéndose al margen de la ley).

No obstante, una carta publicada por el arzobispo de Apatzingán, Miguel Patiño Velázquez, confronta los precarios resultados del gobierno, pues la ciudadanía continúa reprimida –principalmente por los Caballeros Templarios–, y advierte que únicamente en  los seis municipios donde operan las policías comunitarias han disminuido los niveles de hostigamiento.

El caso de Michoacán resulta útil para cuestionar nuestro papel colectivo: lejos de que la solución ante un gobierno ineficiente sea la justicia “por mano propia”, o emprender acciones ilegales como mera rebeldía, este ejemplo nos encamina hacia una reflexión sobre el poder de la organización ciudadana, funciona como un recordatorio sobre los beneficios de actuar superando la cómoda apatía y, además, nos invita a cuestionar el valor de  las leyes cuando la realidad demanda otras salidas urgentes.

Twitter de la autora: @anapauladelatd