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Gobierno local del DF 'vende' un espacio a Azerbaiyán para honrar a Heydan Aliyev, temido ex-dictador de ese país y aliado de la KGB.

Desde hace unos días el Gobierno de la Ciudad de México, encabezado todavía por Marcelo Ebrard, se ha visto envuelto en la polémica por haber autorizado la colocación de una estatua en e el emblemático Bosque de Chapultepec, sin duda uno de los iconos de la capital mexicana.

El escándalo se debe a que el personaje representado es Heydar Aliyev, presidente de Azerbaiyán durante 10 años, de 1993 a 2003, y antes, de 1969 a 1982, líder de la República Socialista Soviética de Azerbaiyán, cargos mediante los cuales controló la vida política de dicho país de Medio Oriente por más de 30 años (para luego cederle el cargo a su hijo), un régimen casi dictatorial de quien iniciara su carrera como agente de la KGB, el controvertido cuerpo de inteligencia soviético, y se abriera paso a base de sobornos, nexos con grupos criminales como la mafia Azeri y supresión de sus rivales políticos por medios poco honorables. Asimismo, en la extendida época de su mandato, las denuncias de violaciones a los derechos humanos y las acusaciones de fraudes electorales fueron constantes.

Una de las estampas que mejor ilustran la naturaleza política de Aliyev fue el regalo que este hizo a Leonid Brezhnev, su principal adversario en la política azerbaiyana durante los 70, de un anillo de diamantes tan enorme y tan impresionante que conoció con el mote de “El Rey Sol”, con un valor estimado en la época de más de 200 mil rublos, un soborno franco para que Brezhnev redujera sus ambiciones en la vida política de Azerbaiyán y dejara el camino libre a Aliyev.

Ahora este personaje es homenajeado en México luego de que el gobierno de Azerbaiyán, a través de su embajada, donara 5 millones de dólares para la recuperación del ahora Parque de la Amistad México-Azerbaiyán, ubicado en la primera sección del Bosque de Chapultepec.

Asimismo, el jefe de gobierno inauguró otro monumento, este ubicado en la Plaza Tlaxcoaque que celebra lo que algunos críticos denominan la masacre o el genocidio de Jodyali, la muerte de cientos o miles de azerbaiyanos (el número no se conoce con certeza) ocurrida en dicha población a manos de fuerzas armadas armenias en febrero de 1992.

Por otro lado, al cuestionamiento a esta decisión del Gobierno del Distrito Federal se añade el hecho de que, en el caso de la estatua de Heydar Aliyev, su colocación se realizó aun cuando el Consejo Rector Ciudadano del Bosque de Chapultepec —el órgano colegiado que participa en la administración de dicho espacio público— cancelara el aval otorgado para la construcción del Parque de la Amistad México-Azerbaiyán.

Para José Sarukhán, ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México,el Gobierno de la Ciudad de México muestra “una ignorancia gigantesca de lo que ha pasado en el mundo” al autorizar la colocación de esta efigie que celebra a un personaje sobre el cual las opiniones favorables no son unánimes.

Por el momento ya se formó una comisión con el propósito de evaluar el destino de la estatua.

Sea como fuere, Marcelo Ebrard podría terminar su administración con el acto ignominioso de contribuir en la celebración y el homenaje a un político que, en su carrera, dejó de honrar los ideales de la democracia y el buen gobierno.

A continuación compartimos la Relatoría de hechos sobre el proyecto “Parque de la Amistad México-Azerbaiyán”, elaborada por las Consejeras Beatriz Bugeda y Mónica Del Villar del Consejo Rector Ciudadano del Bosque de Chapultepec (disponible también en este enlace).

 

Con información de Aristegui Noticias y Excélsior