*

Los doctores se conectan: indicios de un renacimiento en la medicina psicodélica

Por: Luis Alberto Hara - 04/21/2010

Los psicodélicos sacuden con dulce sincronía los medios del mainstream, en los que se muestra con inusitado interés los posibles beneficios de las sustancias psicodélicas y los estudios médicos que se están realizando en prestigiosas universidades después del tabú y prohibición de varias décadas.

En lo que parece ser una de la más clarass señales de una evolución en términos de apertura y conciencia, los medios del mainstream de Estados Unidos empiezan a reportar sobre los posibles beneficios médicos de las sustancias psicodélicas y nuevos estudios científicos se replican.

El 12 de abril del 2010 apareció en la portada impresa del New York Times la nota Hallucinogens Have Doctors Tuning In Again, que refleja las experiencias de algunos doctores tomando estas sustancias y que incipientemente consideran víable el uso médico de los psicodélicos.

El Dr. Grob dice:

"Bajo la influencia de alucinógenos los individuos trascienden su identificación primaria con su cuerpo y experimentan estados libres de ego antes del tiempo de su estado físico actual, y regresan con una nueva perspectiva y una aceptación profunda de la constante de la vida: el cambio".

Algo bastante "elevado" para las conservadoras páginas del Times.

La periodista Campbell Brown presentó en CNN la siguiente nota en la que se muestra con resonancias magnéticas los beneficios físicos de algunos de estos psicodélicos.

También se habla del valor terapeútico de los hongos psilocibe y las alternativas de estas sustancias para tratar padecimientos que otras sustancias no han logrado tratar con efectividad. Uno de los panelistas hace referencia al hecho estimatizado de que los psicodélicos desde el tiempo de Nixon son clasificados como sustancias controladas de clase A, al igual que la heroína, sin ningún tipo de beneficio médico y sí, en cambio, perjuiciosas para la salud, lo cual es una de las más sesgadas y absurdas definiciones de la historia. Puesto que la mayoría de los psicodélicos no producen ningún tipo de adicción y sí, en cambio, tienen varios beneficios médico que deberían de estudiarse.

El portal de noticias de ABC destacó hace dos días, en el aniversario del primer viajde intencional de LSD, una noticia (Stairway to Heaven: Psychedelics Soothe Dying) que nosotros ya habíamos cubierto aquí, sobre estudios utilizando hongos alucinógenos en pacientes en fase terminal, y no sólo para lidiar con el trauma sino inlcuos, hipotéticamente para "aprender a morir" y para las personas que tienen algun tipo de creencia en otra vida, cruzar ese umbral con soltura.

La revista Wired publicó ayer una nota sobre la reciente conferencia de estudios científicos psicodélicos realizada el pasado fin de semana en San Jose, California

Al parecer se podría aprobar el uso de psilocibina como tratamiento adicional al cáncer; el LSD parece ser efectivo en la cefalea de rácimo y la ayahuasca y la ibogamina están entre la vanguardia de sustancias aptas para tratar las adicciones.

De seguir esta ola científica psicodélica estaríamos de vuelta a Divinity Lane, en Harvard, donde Tim Leary (siguiendo los pasos de Hofmann, Wasson, Huxley, etc.) en 1960 inició una radical y tranformadora area de estudio. La cual evidentemente luego tuvo su lado oscuro y acabó en la recalcitrante prohibición de estas poderosas sustancias.

Antes de morir el Dr. Hofmann, inventor del LSD y primero en sintetizar la psilocibina, le envío una carta a Steve Jobs, quien había dicho que su vida se transformó cuando tomó LSD, en espera de que el magnate digital ayudara a impulsar la investigación médica en torno a los psicodélicos. Sin la ayuda del magnate, con solamente la más clara evidencia, esto podría estar pasando: tal vez en un futuro cercano sea posible para todos, en un contexto apropiado, acceder a la llamada"medicina del espíritu".