Hay que tener pésima suerte (o muy buena según se vea) para que te caiga encima una mujer del cielo, pero eso fue lo que le sucedió a un peatón que caminaba por Viladecans en Barcelona.
Una suicida, cuyo nombre no se ha hecho público, se arrojó del octavo piso del edificio que aparece en la foto y con tanatológico tino cayó enicma de un hombre ucraniano que caminaba, al parecer sin prestar atención al paisaje celeste, con su pareja.
La suicida murió al momento y el hombre fue trasladado al hospital de Bellvitge donde murió poco tiempo después. Su pareja salió ilesa.
Vía El Clarín
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