Con más de 2000ºC de temperatura en su superficie y una composición de grafito y diamante, el exoplaneta 55 Cancri e ha sido comparado por la NASA con la noción del Infierno católico en donde, según la creencia más extendida, el fuego del castigo arde eternamente.
Descubierto en 2011, 55 Cancri e es un exoplaneta a cuarenta millones de años luz de la Tierra que orbita en una estrella similar al sol, con un tiempo de traslación de dieciocho días y aproximadamente dos veces más grande que la Tierra.
Su temperatura tan elevada, que ha sido estimada en 2 148ºC, está por encima del punto de fusión de los minerales típicos formadores de rocas. De ahí la importancia de su hallazgo y su estudio, pues ello permitirá conocer con mayor certeza la evolución de planetas rocosos similares a la Tierra.
"Un ángel conduce un alma al infierno", Hieronymus Bosch (c. 1450-1516) (seguidor de)
En cuanto a la comparación entre el exoplaneta y el Infierno del imaginario católico, Mario Arroyo, sacerdote y doctor en filosofía por la Pontificia Universidad de la Santa Cruz de Roma, refutó la idea asegurando que el infierno "no es un lugar sino un estado de privación eterna y definitiva de Dios".
Además, indicó que el hecho de que los científicos de la NASA lograran descubrir un planeta con una temperatura elevada y lleno de lava derretida sólo representa "una metáfora sobre el Averno".