Las lluvias de estrellas son de los fenómenos más mágicos del mundo celeste, y este mes, el 28 y 29 de julio, podremos ser testigos de la lluvia de las Delta Acuáridas.
De acuerdo con la NASA, los meteoros de esta lluvia vienen de pedazos de asteroides y cometas rotos que flotan en el espacio. En el espacio, enormes trozos de roca, gas y polvo congelados orbitan alrededor del sol. Esos trozos son lo que conocemos como cometas. Cuando un cometa le da la vuelta al sol, de él se desprende una estela de polvo que entra en la órbita solar.
Cada año la Tierra atraviesa los desechos, lo que genera que los pedazos choquen contra nuestra atmósfera. Una vez que chocan con ella se desintegran, y eso es lo que vemos como destellos en el cielo nocturno.
Las Delta Acuáridas son los desechos del cometa 96P/Maccholz, el cual orbita al sol cada cinco años. Los meteoros proceden de la constelación de Acuario, cerca de la estrella Delta Aquarii; de ahí el nombre de la lluvia de meteoros.
Este año, la lluvia de meteoros de las Delta Acuáridas alcanzará su punto máximo la noche del 28 de julio y la madrugada del 29. El punto álgido será aproximadamente a la 1 de la madrugada y durará hasta el amanecer.
Esta lluvia no es de las más activas, pero se podrán ver en promedio de diez a veinte meteoros por hora atravesando el cielo. Para tener una mejor visibilidad se recomienda estar en un lugar muy oscuro en donde las luces de la ciudad no obstruyan el brillo de las estrellas.