La compañía Company New Heroes y la compañía de biotecnología Krown-design, ambas holandesas, hicieron equipo para crear un edificio hecho de hongos. Lo bautizaron The Growing Pavillion, o "Pabellón en crecimiento". Ambas compañías promueven la creación de distintos productos con base biológica. Sobre todo construcciones que podrían ser habitables y que cumplan con las características de la sustentabilidad, pues la producción de materiales como el concreto es responsable de las grandes emisiones de CO2.
Esta estructura está hecha completamente de materiales que crecen en la tierra. El equipo que la construyó llenó los moldes con desecho de cáñamo, algodón y madera en donde pusieron micelio, que es el conjunto de raíces de los hongos. La ventaja del micelio es que crece muy rápido y crea superficies bastante resistentes.
En 4 días el micelio creció lo suficiente como para llenar todo el molde, y una vez llenado, el material se secó con calor para que el micelio dejara de crecer.
Lo que resalta de este pabellón es que además de estar hecho de materiales 100% sustentables, los hongos purifican el aire.
Este proyecto es el resultado de muchos años de investigación, porque no todos los materiales con base biológica eran lo suficientemente resistentes como para sostener esta estructura. Además de que los materiales también tuvieron que cumplir criterios estéticos.
Una de las preguntas que este tipo de proyectos intenta contestar tiene que ver con la necesidad de transitar hacia una economía de productos con una base biológica.
Por ahora la producción a gran escala de este tipo de construcción requiere de todo tipo de regulaciones: ambientales, jurídicas y políticas. Sin embargo, estas dos empresas han puesto en el debate, por lo menos en Holanda y en Europa, la necesidad de incorporar los productos con base biológica.
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