El astronauta Edgar Mitchell murió este jueves a los 85 años de edad, 1 día antes del aniversario de su alunizaje hace 45 años. Mitchell fue el sexto hombre en pisar la Luna y fue el piloto del módulo lunar de la misión Apolo 14.
En una entrevista Mitchell dijo que la experiencia de ir a la Luna le cambió la vida, abriendo de alguna manera las puertas de la percepción: "Fue una experiencia de éxtasis, notar que cada molécula de nuestro cuerpo es un sistema de materia creado por una estrella colgando del espacio. La experiencia que tuve fue de lo que en sánscrito llaman samadhi, una sensación de absoluta alegría al ver la Tierra desde la perspectiva de la Luna".
Además de ser la persona que más tiempo neto ha pasado caminando en la Luna (un récord ciertamente envidiable), en los últimos años el astronauta se convirtió en uno de los líderes de la comunidad UFO, así como también de la investigación de la conciencia y los fenómenos paranormales, siendo uno de los fundadores del Institute of Noetic Sciences. En repetidas ocasiones Mitchell aseguró que la vida extraterrestre existe y que Estados Unidos y otros países lo encubren: “El hombre siempre se ha preguntado si está solo en el universo. Pero sólo es hasta nuestra época que tenemos evidencia. No, no estamos solos… Nuestro destino, si me preguntan a mí, es volvernos parte de la comunidad transplanetaria”.
Mitchell dijo a CNN que sostuvo una reunión en el Pentágono hace 10 años en la cual habló sobre Roswell con un oficial del gobierno estadounidense, quien, sin embargo, luego negó haber participado en dicha reunión. Nacido él mismo en Roswell, Nuevo Mexico, donde supuestamente una nave espacial fue derribada, el astronauta creía que este incidente realmente había ocurrido, a razón de lo que se decía en su pueblo.
La comunidad que cree en el fenómeno OVNI consideraba que Mitchell era una de las personas más calificadas para opinar sobre este tema. Sin embargo, habría que recordar lo que expone el documental Mirage Men, donde se documentan las tácticas de desinformación de las agencias estadounidenses, mostrando que agentes gubernamentales filtraron información falsa con la intención de hacer creer que estaban encubriendo este fenómeno a personas interesadas, alimentando las teorías de conspiración. Un ejemplo de esto es el caso del oficial Richard Doty. Es difícil saber si Mitchell realmente creía en los extraterrestres, si había sido engañado por el gobierno o si verdaderamente tuvo experiencias fidedignas. Esto probablemente se lo llevó a la tumba. Descanse en paz en las estrellas, Edgar Mitchell.