Hace un par de días se dio a conocer el descubrimiento arqueológico de un templo de 5000 años de antigüedad, situado en Orkney, un archipiélago al norte de Escocia, que podría ser más importante que el legendario Stonehenge.
Aunque las ruinas no eran desconocidas, hasta ahora se creía que solo consistían en los restos de 14 edificios levantados en la Edad de Piedra, sin embargo, utilizando tecnología geofísica (similar a la que se empleó en el sitio donde tal vez se reunían el Rey Arturo y sus caballeros), los arqueólogos descubrieron más de 100 construcciones aledañas que forman una especie de recinto sagrado.
Los especialistas consideran que este lugar podría formar una perspectiva totalmente distinta sobre la vida religiosa en el Neolítico, de la cual se piensa hasta ahora que giraba en torno a Stonehenge.