Startup busca aprovechar los sueños para seguir trabajando
Medios y Tecnología
Por: Cristhian Pagot - 12/13/2023
Por: Cristhian Pagot - 12/13/2023
En un mundo donde la tecnología y la neurociencia se encuentran en constante evolución, la startup Prophetic surge con una propuesta que podría parecer sacada de una novela de ciencia ficción: un dispositivo capaz de inducir sueños lúcidos para trabajar mientras dormimos.
El dispositivo, llamado Halo, es un innovador proyecto que promete convertir las horas de sueño en un campo de pruebas para la resolución creativa de problemas y práctica de habilidades. Diseñado como un dispositivo de neuroestimulación no invasiva, Halo se presenta como una herramienta para activar estados de ensueño consciente, permitiendo a los usuarios tomar control sobre sus experiencias oníricas.
Aunque la idea de trabajar mientras dormimos puede sonar atractiva, también plantea importantes preguntas éticas y morales. ¿Hasta dónde estamos dispuestos a permitir que la tecnología se infiltre en nuestros espacios más íntimos y personales, como son los sueños? La propuesta de Prophetic desafía las fronteras entre el trabajo y la vida personal, sugiriendo un futuro en el cual incluso nuestros momentos de descanso puedan ser colonizados por la productividad.
Con una inversión que ya supera el millón de dólares y colaboraciones con diseñadores de dispositivos de alta tecnología como Neuralink de Elon Musk, Prophetic se perfila como un jugador importante en el campo de la tecnología del sueño. Sin embargo, aún quedan dudas sobre la efectividad y los impactos a largo plazo de esta tecnología. La startup no es la primera en prometer la inducción de sueños lúcidos, y hasta la fecha, ningún producto ha logrado ofrecer esta experiencia de manera consistente a los consumidores.
Prophetic planea lanzar el Halo al mercado en 2025, con un costo estimado entre $1,500 y $2,000 dólares. A pesar del entusiasmo generado, el dispositivo enfrenta escepticismo y preocupaciones sobre la ética de mezclar sueño con trabajo.
En conclusión, el Halo de Prophetic abre un debate sobre los límites de la tecnología en nuestras vidas y el precio que estamos dispuestos a pagar por la eficiencia y la productividad. En un mundo donde cada vez más aspectos de nuestra vida son susceptibles a la intervención tecnológica, proyectos como el de Prophetic nos invitan a reflexionar sobre el futuro que estamos construyendo.