Demonios de Tasmania: la especie en peligro de extinción que todavía tiene una última esperanza
Ecosistemas
Por: Marijo Bazán - 10/20/2022
Sorpresivamente, la población de demonios de Tasmania se ha reducido en los últimos años en un 90% a causa un forma contagiosa de cáncer facial
Hace unos meses, el espacio de conservación australiano llamado Aussie Ark anunció con entusiasmo el nacimiento de algunos ejemplares de los mamíferos marsupiales conocidos comúnmente como demonios de Tasmania, cuyo nombre científico es Sarcophilus harrisii. Esta noticia representa un gran logro en los avances para conservar, preservar y reproducir a esta especie que llevaba más de tres mil años fuera de territorio australiano.
Pero, ¿por qué los demonios de Tasmania en peligro de extinción?
La población principal de los demonios feroces en Tasmania se ha reducido en aproximadamente un 90% debido a una forma contagiosa de cáncer facial. A pesar de los esfuerzos por desarrollar vacunas y encontrar formas de ayudar a la especie a luchar contra la enfermedad, actualmente no existen tratamientos efectivos para que los animales puedan sobrellevar los estragos en su salud.
Normalmente las células cancerosas se propagan por el cuerpo, pero en el caso de los demonios de Tasmania estas células también se reproducen a través del contacto entre ellos, algo poco común en el cáncer. Los seres humanos y otras especies no son susceptibles a esta enfermedad, a diferencia de estos mamíferos.
A este tipo de cáncer se le ha denominado tumor facial del diablo (DFTD) y fue descubierto hace aproximadamente veinte años en la región de Tasmania. Cuando algún demonio de Tasmania se ve afectado por esta enfermedad tiende a quedar desfigurado e incapacitado para alimentarse pues los tumores crecen alrededor de la boca, los ojos y la nariz, por lo que su destino final es la muerte a causa de la desnutrición y el dolor.
Por ello, aunque los nacimientos recientes de demonios de Tasmania en Australia han dado esperanza, decir que están de vuelta en la naturaleza no es completamente certero, pero es bueno ver que se están reproduciendo en un entorno seminatural. Algunos expertos cuestionan si los costosos esfuerzos para reintroducir a una población de demonios de Tasmania en Australia son el mejor uso de los limitados fondos disponibles para proyectos de conservación, y si los demonios alguna vez podrán sobrevivir sin la protección de las cercas.
Los cuidadores de la especie también esperan que si una población libre de enfermedades de estos tenaces depredadores, que pueden alcanzar el tamaño de un perro pequeño, se establece en Australia, podría ayudar a combatir el flagelo de los gatos salvajes y los zorros introducidos que amenazan a muchas de las especies nativas del continente.
Esperemos que el destino de esta maravillosa especie sea alentador y un ejemplo de conservación de mamíferos en peligro de extinción.
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