*

En su libro 'The Book of Yôkai: Mysterious Creatures of Japanese Folklore', Michael Dylan explica cómo "el baño es un espacio liminal en donde existe una conexión entre lo normal y un reino totalmente diferente, como si fuese una alcantarilla"

Como cualquier leyenda urbana de las escuelas, la presencia de fantasmas que recorren los pasillos y los baños de las niñas es inevitable en los juegos infantiles. Sin embargo, en Japón, los fantasmas forman parte del folclor y la cultura típica de la región. En especial los fantasmas relacionados con los baños.

En su libro The Book of Yôkai: Mysterious Creatures of Japanese Folklore, Michael Dylan explica cómo "el baño es un espacio algo inusual en un hogar o escuela o en cualquier sitio [...] un espacio liminal en donde existe una conexión entre lo normal, el mundo de la cotidianidad y un reino totalmente diferente, como si fuese una alcantarilla". Un ejemplo de estos fantasmas o espíritus japoneses asociados directamente con los baños es Toire no Hanako-san o Hanako del baño.

Como todas las leyendas urbanas de fantasmas, los detalles del origen de Hanako varía según las zonas en que se alcanza a ver. Hay quienes dicen que de trata del espíritu de una joven que murió en la segunda guerra mundial y ahora se encarga de cazar en los baños. Lleva un antiguo uniforme rojo y un corte de cabello estilo bob, y puede ser invocada yendo al baño del tercer piso, tocando tres veces en la tercera puerta y diciendo: "¿Estás ahí Hanako-san?" Ella podrá responder "Sí, aquí estoy", y una mano aparecerá. Y si en ese momento alguien más entrara al baño, todos podrían ser devorados por un cocodrilo de tres cabezas.

Hanako se ha convertido incluso en una estrella tanto de la televisión como de series de anime, y desde la década de los 90 formó parte de la cultura popular que se transmite desde el folclor. Otro ejemplo es Kashima Reiko, otro espíritu de una joven que asusta en los baños de Japón. Es considerada otra leyenda urbana, en la que se cuenta cómo Reiko murió al perder las piernas en un accidente de tren y ahora recorre los baños preguntando a sus visitantes: "¿En dónde están mis piernas?". Se dice que la respuesta correcta es "En el tren Meishin" para evitar una muerte rotunda, o de lo contrario ella te arrancará las piernas.

Esta última leyenda urbana es una variación de otra historia de terror japonesa conocida como Teke-Teke, la cual también cuenta la historia de una joven que un tren cortó a la mitad. En esta versión se dice que el fantasma aparecerá durante el primer mes en que se conoce su historia. De hecho, para Foster, existe una similitud entre esta leyenda urbana y la historia de El aro, en donde el aspecto liminal resulta en los objetos cotidianos que conectan a ese otro mundo de los espíritus. Esta situación es, de hecho, característica del folclor trágico japonés. Un último ejemplo es el de Aka Manto, o Capucha roja.

También se le conoce como Aoi Manto, que quiere decir Capucha azul, o Akai-Kami-Aoi-Kami -Papel rojo, papel azul-. Este espíritu moderno se presenta con una capa y una máscara que oculta un rostro embellecedor. Se dice que, normalmente, aparece al final del pasillo del baño preguntando a su interlocutor si prefiere la capa roja o la capa azul. En caso de que la persona responda "capa roja", el espíritu la desollará; y sí responde "capa azul", el espíritu la asfixiará. La única manera de escapar de Aka Manto es rechazar su oferta por completo. Sin embargo, para Foster, estos personajes sanguinariamente asesinados no son los únicos espíritus relacionados con los baños. También están los entes mitológicos cuyos lugares favoritos resultan los baños hogareños. Entre ellos se encuentra Kappa, una criatura que generalmente acosa a las mujeres cuando éstas se hallan cerca del agua. Así como Akaname, un espíritu goblinesco que posee una protuberante lengua con la que se come la suciedad de las tinas de baño y se siente atraído por los movimientos intestinales.

Los espíritus japoneses que residen en los baños son seres que nos recuerdan la vulnerabilidad de la desnudez en sitios para la higiene personal. Por ello, según la costumbre del lugar, el baño es solo un sitio en el que no se debería pertenecer más tiempo del necesario...