El regalo es caricia, sensualidad: vas a tocar lo que he tocado, una tercera piel nos une. Regalo a X... una pañoleta y la lleva puesta: X... me regala el hecho de llevarla...
Roland Barthes, Fragmentos de un discurso amoroso
Roland Barthes, el reputado teórico francés, habría cumplido 100 años en 2015. Para celebrarlo Hermès, la marca de artículos de lujo, ha lanzado una bufanda de seda en un exclusivo lote de colección. El director artístico de la marca, Pierre-Alexis Dumas, mencionó durante el lanzamiento de la prenda que "una frase bien hecha, construida con palabras elegidas con precisión, es como una bufanda, hecha con materiales finamente tejidos; ambas dependen de la mano del artesano". A esto agregó: "Una bufanda es algo muy íntimo: absorbe fragancia y tu aroma, y expresa la emoción y la memoria".
Uno puede pensar que con los 895 euros que cuesta la bufanda se podrían comprar varios tomos de libros seminales como Mitologías, El grado cero de la escritura y S/Z; sin embargo, Barthes fue un cercano crítico no sólo de la moda de su tiempo, sino también de las costumbres sociales vistas a través de las ciencias sociales y la meditación especulativa.
Es por eso que la marca eligió al artista gráfico Philippe Apeloig para realizar un homenaje a una de las obras más conocidas de Barthes, Fragmentos de un discurso amoroso, cada una de cuyas páginas muestra varias capas de texto: desde la reflexión filosófica hasta los paratextos al margen, que funcionan como nuestros modernos hipervínculos, al convocar conceptos, ideas o referencias pertinentes para el tema a tratar: la representación del amor en las prácticas occidentales.
La idea del diseñador fue recuperar este aspecto visual de la escritura bartheana oscureciendo el texto original, lo que convierte las palabras en "bloques gráficos". Luego, cada página "fue reproducida en su orden original, como un mosaico."
Imagen: Hermès
La profesora de literatura francesa Christy Wampole escribió un texto para el New Yorker tratando de especular cuál habría sido el recibimiento del propio Barthes respecto a su bufanda. Según ella, "la bufanda Barthes es un objeto particularmente legible y mitológico", siempre utilizando la terminología del autor. "Frágil, costosa, y por ello para ser manejada con cuidado, como él manejó sus objetos de estudio".
La seda de la bufanda es además un material especialmente bien elegido para conmemorar a Barthes, pues "es una fibra natural, exudada por una criatura viviente y por ello contiene algo de su vida en ella; su historia representa el encuentro entre Oriente y Occidente; y su invitación a ser tocada la coloca en la misma categoría que la piel humana". Probablemente el aspecto más interesante es que "puede recordarnos el vínculo olvidado entre 'texto' y 'textil'. El texto del autor se vuelve textil".