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"Drone boning", una película porno de arte hecha con drones (NSFW)

Arte

Por: Luis Alberto Hara - 11/09/2014

El porno filmado por robots voladores es hermoso: hipnóticas tomas aéreas en espléndidos parajes naturales en los que drones muestran a la sexualidad humana regresando a la inmensidad de la tierra

Hay veces en que la tecnología eleva un género a una siguiente dimensión en cuanto a su capacidad de expresión estética --y si bien en ocasiones ahoga su narrativa suplantándola por la mera aparatosidad técnica, cuando se trata de una forma que carece totalmente de narrativa, como el porno, el efecto es altamente bienvenido. Este es el caso del porno filmado con drones que estrena la productora Ghost Cow: Drone boning, una épica y sutil seguidilla de actos sexuales en la naturaleza filmados desde las alturas con hipnóticos acercamientos y alejamientos que nunca llegan al explícito close-up al cual nos tiene acostumbrados la industria del porno. Poesía erótica filmada por robots voladores.

Drone boning nos muestra una versión más elegante de una corriente del porno que busca llevar a la audiencia la fantasía del retorno a la naturaleza, una cópula entre divina y animal, donde el tálamo erótico son las flores, las montañas, el mar, a su vez aumentados por las tomas aéreas que evocan la estética de las imágenes satelitales de planos abstractos o de gran simetría geométrica. Los cuerpos sin rostro se pierden en la inmensidad con el acto apenas reconocible pero poderoso de su cópula. Y sí, el amor (aunque sea filmado por drones) es un acto político.

Según el director Brandon LaGanke, la inspiración de este majestuoso corto que lo mismo entra en la clasificación de "earthporn" con los videos de National Geographic o algo así, es explorar la noción de que los drones pueden ser usados para "hacer porno y no la guerra", con una aplicación artística y conceptual más interesante que sólo violar la privacidad de los ciudadanos o invadir de manera deshumanizada con sus ataques aéreos. Sin duda, una excelente idea; sólo faltó hacer como el proyecto de porno eco-consciente Fuck For Forest, que utiliza sus ganancias para salvar el bosque.

Por cierto, las parejas que aparecen en Drone boning no son actores; son voluntarios que respondieron a una convocatoria.

dronebone