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El comediante con discurso revolucionario, Russell Brand, prepara una serie de cuentos infantiles destinados a cambiar la forma en la que los niños ven el mundo.

piedpiperrussellbrandEl comediante y activista antisistema Russell Brand ha firmado un contrato con una editorial para publicar una serie de libros para niños basados en cuentos clásicos pero reinterpretados por su visión revolucionaria. La serie se llamará Russell Brand’s Trickster Tales y empezará con su versión del "Flautista de Hamelín", el clásico escrito por los Hermanos Grimm. Como muchos cuentos de hadas y demás historias para niños, esta historia se basa en leyendas folclóricas y en una tradición oral que recoge un código moral, una serie de arquetipos y estructuras narrativas que son parte de la columna vertebral de nuestra sociedad. 

Los libros serán ilustrados por el artista Chris Riddell, quien ha recibido múltiples premios y lo mismo ha ilustrado comentarios políticos que libros para niños, lo cual lo hace la pareja ideal de Brand, ya que la serie propuesta tiene una clara intención política. Según ha declarado Riddell, la idea es que los cuentos para niños son un acervo que contiene "un código para desbloquear ciertos aspectos de nuestra conciencia". Russell Brand señaló que "una vez que los niños ven el mundo diferente, el cambio es inevitable".

Brand fue el protagonista de una controversial entrevista con la BBC en la que dijo que la democracia actual es una farsa, una especie de teatro polarizado que nos sirve la ilusión de que en realidad decidimos y afectamos al mundo, cuando los diferentes bandos sólo protegen los mismos intereses. Por lo cual, en su opinión, votar no es más que participar en esta fachada que llamamos democracia —en cambio propuso generar un nuevo sistema, con tintes utópicos, basado en el eliminar la desigualdad y en cuidar el ecosistema.

Su diatriba revolucionaria, no sin inteligencia (Brand es, no hay duda, una persona mentalmente ágil), generó elogios y críticas en diversos sectores de la sociedad. Desde el mainstream, la negación a la participación ciudadana parece ser una abominación y una herejía; por otro lado los sitios conspiracionistas, que consideran que todo el sistema es manipulación sin excepciones, sintieron su narrativa un poco amenazada y han señalado que Brand es una especie de bufón o tonto útil del mismo sistema que hace de la rebeldía parte de su sistema inmune y vende la idea de ser diferente como algo cool.

Henrik Palmgren, del sitio Red Ice Creations, ve en la iniciativa de Brand de escribir libros para niños un plan de programación mental de las élites en el poder, que tiene ideas socialistas ligadas a la Sociedad Fabiana. La intención sería llegarle a los niños desde temprano para moldearlos y recuerda Palmgren: "reescribir la historia" es algo que ya hemos visto antes entre gobiernos fascistas.

¿Qué les parece la iniciativa de Brand? ¿Se trata de un sincero esfuerzo por educar a los niños de manera más libre, incrementando su conciencia ecológica y alejarlos de los paradigmas capitalistas que rigen nuestra sociedad? ¿O se trata de una manipulación orquestada por las mismas agendas políticas que mantienen el sistema neoliberal capitalista-consumista moderno? O, por qué no, ¿se trata solamente de una oportunidad en el mercado, un buen negocio capitalizado por las editoriales, que aprovechan el estatus de Brand como una voz rebelde que gana legitimidad para emitir un discurso alternativo?