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Tras 5 horas de compras con su novia, hombre en China prefiere suicidarse a continuar en el centro comercial

Por: Luis Alberto Hara - 12/11/2013

Una vez que su novia le dijo que entraría a otra tienda de zapatos, el hombre comenzó a discutir con ella y al final prefirió arrojarse desde un séptimo piso, impacto que provocó su muerte.

chinaPara muchos esta temporada es sobre todo una temporada de consumo, de centros comerciales y compras desbordadas. Tiendas de zapatos, ropa, electrónicos y grandes almacenes concentran durante un par de semanas a un máximo de población en un mínimo de espacio, consiguiendo niveles de densidad que pocas veces se repiten en otros momentos del año. Un comportamiento que además se ve aderezado por las sesiones maratónicas que algunas personas emprenden: horas y horas de arrobamiento mercantil y cosificador que culminan en la adquisición de un par de tenis, un suéter, un juguete o cualquier otro objeto con el que se busca satisfacer esa imperiosa necesidad de tener algo para hacer sentir bien a los otros.

A veces, sin embargo, las cosas no resultan tan bien como siempre, y el simulacro del consumo como satisfactor se quiebra, revelando de pronto su condición prefabricada y desechable.

En el este de China, en la provincia de Jiangsu, un hombre prefirió suicidarse arrojándose del séptimo piso de un centro comercial, a entrar por enésima ocasión con su novia a una zapatería. La pareja llevaba ya más de cinco horas deambulando en uno de estos templos contemporáneos del capitalismo y el hombre, simplemente, no pudo más.

Por testigos y por las grabaciones del CCTV del lugar se sabe que Tao Hsiao, de 38 años, llevaba varias horas escoltando a su novia, entrando y saliendo de tiendas y cargando numerosas bolsas. En algún momento del día, el hombre comenzó a gritarle a su pareja y a pedirle que se fueran a su casa, al parecer le decía que tenía ya suficientes zapatos, tantos como nunca podría usar en toda su vida, y que era inútil comprar más. Ella por su parte también respondió a gritos y lo acusó de ser un tacaño y de que con su actitud arruinaba la Navidad.

La pelea terminó de modo imprevisible. El hombre dejó caer bolsas y paquetes y se arrojó desde el séptimo piso en donde se encontraba, cruzándose en su caída con los adornos propios de la época y estrellándose al final con un impacto que le causó la muerte instantánea.

“Removieron el cuerpo bastante rápido […], esta temporada del año puede ser de mucho estrés para muchas personas”, comentó un hombre que vio el incidente.