La nave espacial Messenger de la NASA ha recolectado nueva información sobre el planeta Mercurio que sugiere una intensa y hasta ahora desconocida actividad en su superficie y, por otra parte, que su núcleo es totalmente diferente al de otros planetas rocosos similares de nuestro sistema solar.
Messenger lleva un año orbitando en torno a los planetas internos, obteniendo, entre otras cosas, tomas que sugieren a científicos como Maria Zuber que Mercurio sufrió un proceso de enfriamiento poco después de su formación, hace 4.5 mil millones de años, además de que un par de mil millones de años después, el planeta tuvo actividad geológica y tectónica.
Asimismo, los indicios muestran que el corazón de Mercurio, a diferencia de otros planetas como la Tierra, es sólido, denso, rocoso y de mayor magnitud, tomando casi el 85% de su interior.
[Wired]