*

El artista japonés Kenichi Kanazawa manipula granos de arena con vibraciones sónicas para ponerlos a danzar en mágicos patrones geométricos.

La física provoca fenómenos que, en una época no acostumbrada al paradigma racional propio de la modernidad occidental, quizá podrían pasar por actos mágicos o sobrenaturales sin explicación para la mente humana.

Este es el caso de los patrones geométricos que forman granos de arena envueltos en una vibrante danza inducida por el artista japonés Kenichi Kanazawa. El fenómeno con el que Kanazawa forma estas figuras es similar al que se produce cuando rozamos con el dedo el borde de una copa de cristal en la que se ha vertido cierta cantidad de agua. En esta, la cantidad de agua determina si el sonido emitido es más grave o más agudo, es decir, su frecuencia. La superficie de Kanazawa opera de manera similar, solo que el sonido toma cuerpo en los granos de arena y la frecuencia se expresa con las figuras que estos toman.

 

[forgetomori]