La masónica arquitectura de la capital de Estados Unidos fue cimbrada por el terremoto de 5.8 grados en la escala de Richter, dejando una grieta en la parte superior del Monumento a Washington. El terremoto fue el más fuerte en décadas en el estado de Virgina.
El obelisco blanco dedicado a George Washington fue construido desde 1848 a 1884 y mide 555 pies de altura, 55 pies de ancho en la base y en 1855 se instalaron 22 lapidas de la diferentes ordenes masónicas de Estados Unidos.
Aunque el monumento fue dañado, autoridades confirmaron que no está inclinándose como se temía (una nueva Torre de Pisa).
En el sitio hermano Disinfo se preguntan si este agrietamiento no es un hecho simbólico del poder político de Washington.