Luego de una difícil decisión, el jurado de la 23ª edición de la Sonoma Marin Fair terminó por reconocer a Yoda con una distinción bastante especial: ser el perro más feo del mundo. Con 14 años de edad y un linaje que fusiona las razas pequinés y chihuahua, Yoda obtuvo la reñida distinción luego de que su singular estética superara a la campeona del año pasado, Princess Abby, una perrita tuerta de raza chihuahua o a Hércules, un pug ciego de 15 años y quien era el favorito del público.
Tras recibir un cheque por mil dólares y recoger el trofeo de Yoda, su dueña, Terry Schumacher, habló sobre los orígenes del nuevo campeón. La ahora famosa mascota apareció abandonada junto a un edificio. Al principio Schumacher pensó que el animal era una rata desaliñada pero al inspeccionarlo, tal vez con la intención de exterminarlo, se dio cuenta de que en realidad era un perro. Y tras llevarlo a su casa decidió nombrarlo en honor al maestro jedi de la Guerra de las Galaxias.