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Hombre vive con lobos durante un año y termina siendo parte de la manada

Por: Luis Alberto Hara - 01/16/2011

En un increíble ejercicio de bio mimetismo, Shaun Ellis consagró su afinidad por los lobos conviviendo con ellos durante más de un año y siendo admitido como parte de la manada

Una inspiradora historia de convivencia entre un ser humano y la vida salvaje, en este caso representada por una manada de lobos, es la que Shaun Ellis logró protagonizar a lo largo de más de un año. Un intrépido naturalista británico, Ellis, decidió consagrar su afinidad con la naturalza y en particular con los lobos, al lograr convivir con ellos el tiempo suficiente para que fuera admitido como parte de la manada.

Con el tiempo Ellis aprendió el lenguaje corporal de los lobos, sus jerarquías colectivas, sus sistemas de comunicación mediante aullidos y gruñidos, y el determinante papel que juega el olfato dentro de su vida cotidiana. "Para ser incluido en su dinámica social debes encajar en ella en lugar de tratar de dominarla" afirma el naturalista. Además de sus experiencias en las Montañas Rocallosas, y en el Dartmoor Wildlife Park de su natal inglaterra, Ellis quería replicar la vivencia en un centro de estudios del lobo en Idaho.El resto en esta última reserva era convivir con lobos que jamás habían estado en contacto con un ser humano.

Los biólogos del centro de investigación estaban en contra de que yo me insertará en este salvaje escenario. Para ellos yo era una especie de aventurero que provenía de otro país y no contaba con calificaciones necesarias para cumplir con éxito mi misión. Si el frío o los lobos no me mataban, un oso lo haría. Pero a pesar de esto, cuando me introduje no lleve conmigo una pistola, un radio, o una bolsa de dormir. quería ser un lobo solitario".

Una tarde de otoño Ellis salió a su aventura dispuesto a relegar una parte muchas veces inamovible de nuestra humanidad, la cultura, y así fusionarse con el espíritu de los lobos. La disyuntiva era simple: o terminaría muerto en algún punto de las montañas de Idaho, o concretaría una épica historia de transmutación. Y afortunadamente estamos ante una historia con un final feliz.